La Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT) atraviesa una crisis financiera preocupante debido a la salida masiva de clientes.
Algunos de ellos califican como «pésimo» los servicios de telefonía, internet y televisión por cable ofrecidos por la compañía estatal.
Según la Empresa Coordinadora de Empresas Públicas (EMCO) desde el 2018 CNT experimenta una reducción significativa de ganancias.
El año pasado la empresa trabajo a pérdida.
Recibió 529 millones de dólares, pero gastó 592 millones, es decir hubo un déficit de más de 63 millones de dólares.
Ecuavisa conversó con el gerente de CNT, Ralph Suástegui, quien reconoce pérdidas de clientes «en todas sus líneas de negocios«.
No obstante, el funcionario asegura que entre diciembre de 2022 y enero de 2023 ha existido un crecimiento en el número de nuevos clientes.
El exviceministro de Telecomunicaciones, Adrián Ibarra, asegura que si el Gobierno Nacional quiere recuperar a la empresa púbica, «debe inyectar capital».
Actualmente CNT busca mejorar su servicio de internet, migrando de los cables de cobre a la fibra óptica. Esto en diferentes provincias de país.
La nueva tecnología estaría lista en 2025, tiempo en el que también deberán recuperar la confianza de los clientes que se fueron o que aún pagan por el servicio.
