La Corporación Eléctrica del Ecuador (CELEC) canceló de manera unilateral los contratos con Progen Industries LLC para la construcción de las plantas de energía de Quevedo y Salitral, según informó la empresa estadounidense. La decisión, notificada el 28 de mayo y el 3 de junio de 2025, llevó a Progen a anunciar la preparación de demandas de arbitraje internacional contra el Estado ecuatoriano. Este conflicto podría agravar el déficit energético del país, especialmente ante el estiaje previsto entre septiembre de 2025 y marzo de 2026.
Los proyectos, contemplaban la instalación de 150 megavatios en las plantas de Quevedo y Salitral, esenciales para reforzar el suministro eléctrico nacional. Sin embargo, las obras enfrentan un impasse tras la cancelación, lo que pone en riesgo la incorporación de 979 megavatios adicionales al Sistema Nacional Interconectado, según el Plan de Estiaje 2025-2026 presentado por el Gobierno.
Antecedentes de una disputa prolongada
La controversia entre CELEC y Progen se remonta a diciembre de 2024, cuando el Ministerio de Energía notificó a la empresa estadounidense incumplimientos en los plazos de entrega e instalación, imponiendo una multa de $900,000. Los proyectos, que debían entrar en operación a finales de 2024, acumularon retrasos que ambas partes se atribuyen mutuamente. CELEC argumenta que Progen no cumplió con los cronogramas establecidos, mientras que la empresa sostiene que los retrasos se deben a obstáculos generados por la propia corporación eléctrica.
John Manning, director ejecutivo de Progen Industries LLC, con sede en Mulberry, Florida, señaló que los retrasos de CELEC han causado perjuicios económicos de varios millones de dólares. Añadió que la empresa ha cumplido con sus obligaciones contractuales, completando el 130% del valor del trabajo remunerado. Sin embargo, CELEC solo ha pagado por los generadores, dejando pendientes los costos de las obras civiles e instalaciones.
Avances y obstáculos técnicos
A pesar de los inconvenientes, Progen reporta avances significativos en los proyectos. De las 49 unidades generadoras previstas, 46 ya están en Ecuador, y las tres restantes están listas para ser enviadas desde Estados Unidos. La empresa destaca que su tecnología es exclusiva a nivel mundial, siendo la única capacitada para completar, operar y transferir los sistemas a CELEC, según lo estipulado en los contratos. “Nuestra tecnología es única, y solo Progen puede garantizar su implementación”, afirmó Manning.
No obstante, la cancelación de los contratos complica la finalización de las plantas. Progen asegura estar dispuesta a completar las obras para septiembre de 2025, pero exige que CELEC extienda la garantía de cumplimiento. Además, que actualice los términos contractuales para reflejar las condiciones actuales. Sin esta renegociación, la empresa advierte que el arbitraje internacional será inevitable.
Impacto en el sector energético ecuatoriano
El conflicto surge en un momento crítico para Ecuador, que enfrenta desafíos energéticos recurrentes debido a la dependencia de fuentes hidroeléctricas y la vulnerabilidad ante períodos de estiaje. Las plantas de Quevedo y Salitral eran piezas clave del plan gubernamental para mitigar el déficit energético durante la temporada seca. La cancelación de los contratos podría retrasar la incorporación de nueva capacidad al sistema eléctrico, afectando a hogares y sectores productivos.
Progen ha expresado su voluntad de resolver la disputa de manera equitativa, instando a CELEC a reconsiderar su decisión y retomar las negociaciones. Mientras tanto, el anuncio de un posible arbitraje internacional agrega incertidumbre al panorama energético del país.
