Las intensas lluvias en Portoviejo siguen causando estragos en varios sectores, generando desesperación y malestar entre los residentes. Los barrios más afectados incluyen Los Florones, El Guabito y zonas de la parroquia Andrés de Vera, donde el lodo ha obstruido gravemente el sistema de drenaje. Según Portoaguas, en Los Florones, uno de los puntos más críticos, inicialmente se requirieron hasta cuatro hidrosuccionadores simultáneamente.
Mauro Guillén, gerente de la empresa pública Portoaguas, detalló que esto se debe al impacto de la fuerte temporada invernal desde mediados de febrero. Las intensas precipitaciones, que hasta la fecha han superado el doble de lo registrado en el fenómeno de El Niño de 1998, han desbordado la capacidad de respuesta, causado inundaciones en la zona rural y reducido la producción de agua potable.
Si se toma en cuenta sólo la afectación en el sistema de alcantarillado, los problemas van más allá de los reboses, pues los socavones también han sido frecuentes. Sólo entre febrero y la segunda semana de abril Portoaguas registró nueve hundimientos por colapso de tuberías. Las zonas más afectadas fueron las avenidas Reales Tamarindos y Ejército.
Alertas superan la capacidad de respuesta
Desde febrero de 2025, Portoaguas ha realizado 1.600 intervenciones con vehículos hidrosuccionadores en la ciudad, evidenciando la magnitud de la crisis. De hecho, Guillén detalló que en un solo día, Portoaguas registró un récord de 545 requerimientos para vehículos hidrosuccionadores, utilizados para desobstruir el alcantarillado.
El portavoz explicó que el lodo arrastrado por las crecientes hacia los sistemas de alcantarillado afecta especialmente a los sectores bajos de Portoviejo. La apertura de alcantarillas por parte de los ciudadanos, en un intento por aliviar inundaciones, ha empeorado la situación al permitir el ingreso de más sedimentos.
Actualmente la empresa opera con cinco carros propios y ha contratado dos unidades privadas adicionales para atender la emergencia. Al cierre del 14 de abril, quedaban 120 intervenciones pendientes, una cifra que se ha reducido tras priorizar los sectores más afectados. Guillén indicó que los trabajos con apoyo privado finalizaron el jueves 17 de abril, tras lo cual se dependerá de los recursos municipales.
Sectores críticos bajo presión
Los Florones, El Guabito y Andrés de Vera son los barrios más impactados, donde crecientes de lodo han obstruido el alcantarillado. En Los Florones, inicialmente se requirieron hasta cuatro hidrosuccionadores simultáneamente. Actualmente, el promedio es de 60 intervenciones diarias, reflejando un esfuerzo continuo por mitigar los reboses.
Sin embargo, en ciudadelas como Bellavista el malestar persiste porque la intervención realizada hasta ahora no logra solucionar el problema. Eduardo Miranda, habitante de esta zona, contó que las aguas contaminadas con heces fecales se han convertido en parte del paisaje, obligándolos a permanecer con puertas y ventanas cerradas.
Algo similar ocurrió en un tramo de la calle Miguel H. Alcívar, a pocos metros del Puente Rojo, donde los vecinos soportaron durante más de dos semanas los olores nauseabundos de las aguas servidas. El problema ya fue solucionado; sin embargo, para David Naranjo, dirigente local, lo que urge es una solución definitiva para evitar los colapsos y la contaminación.
Alcantarillado: una solución de casi $8 millones
Las autoridades de Portoaguas aseguran que las intervenciones continuarán hasta estabilizar los sectores afectados. Los esfuerzos se centran en limpiar el alcantarillado y prevenir nuevos reboses, especialmente en barrios vulnerables.
La contratación de hidrosuccionadores privados refuerza la respuesta ante una emergencia que ha puesto a prueba la infraestructura de Portoviejo. Los residentes esperan soluciones definitivas para enfrentar las consecuencias de este invierno excepcional.
Al respecto, Guillén mencionó que el costo para reemplazar los colectores en la ciudad asciende a casi $8 millones. Indicó que los estudios están listos, pero el Municipio de Portoviejo está en busca del financiamiento.