El Ministerio de Salud Pública (MSP) ha anunciado un plan de vacunación intensificado en Pichincha, Santo Domingo de los Tsáchilas, Manabí y Guayaquil, tras el aumento de casos de tosferina y fiebre amarilla. Las jornadas especiales se llevarán a cabo en centros de salud y centros comerciales, con énfasis en niños menores de 7 años.

Tosferina: esquema de vacunación

La tosferina es una enfermedad respiratoria altamente contagiosa causada por la bacteria Bordetella pertussis. Es especialmente peligrosa en bebés y niños pequeños, quienes tienen mayor riesgo de complicaciones graves como neumonía, convulsiones o incluso la muerte.

El Ministerio de Salud Pública ha establecido el siguiente esquema de vacunación para niños en Pichincha:

Bebés de 2, 3 y 4 meses: Vacuna Pentavalente (difteria, tosferina, tétanos, hepatitis B, Haemophilus influenzae tipo B).

Niños de 18 meses: Refuerzo con DPT (difteria, tosferina, tétanos) o Pentavalente.

Niñas y niños de 5 años hasta 6 años, 11 meses y 29 días: Segundo refuerzo con vacuna DPT o Pentavalente.

Todos los niños de hasta 7 años: Deben tener las 5 dosis del esquema de vacunación.

Las jornadas de vacunación se realizarán en los siguientes períodos:

12 al 16 de mayo: Énfasis en niños menores de 2 años.

19 al 22 de mayo: Énfasis en niños menores de 7 años.

17 y 18 de mayo: En centros comerciales de Pichincha, vacunación para niños menores de 2 años.

23, 24 y 25 de mayo: En centros comerciales de Pichincha, vacunación para niños menores de 7 años.

Se informará oportunamente los centros comerciales que serán habilitados para las jornadas especiales de vacunación en cada una de las provincias priorizadas.

Fiebre amarilla: esquema de vacunación

La fiebre amarilla es una enfermedad viral hemorrágica transmitida por la picadura de mosquitos infectados, principalmente del género Aedes. Es endémica en áreas tropicales de América Latina y África.

El Ministerio de Salud Pública ha establecido el siguiente esquema de vacunación para la provincia de Pichincha:

Niños de 12 a 23 meses: Dosis única (esquema nacional).

Viajeros de 1 a 59 años: Dosis única, al menos 10 días antes de viajar a países que solicitan el certificado internacional de vacunación contra fiebre amarilla.

Residentes, turistas y comerciantes de 2 a 59 años: Deben vacunarse al menos 10 días antes de ingresar a las provincias amazónicas.

La vacuna contra la fiebre amarilla ofrece inmunidad de por vida con una sola dosis.

Tosferina

En lo que va de 2025, se han registrado 45 casos confirmados de tosferina en la provincia de Pichincha, según datos del Ministerio de Salud Pública.

La tosferina, también conocida como pertussis, es una enfermedad respiratoria altamente contagiosa causada por la bacteria Bordetella pertussis. Se transmite por el aire a través de gotículas respiratorias al toser, estornudar o hablar, y puede infectar a personas de todas las edades, aunque es especialmente peligrosa en bebés y niños pequeños, quienes tienen mayor riesgo de complicaciones graves como neumonía, convulsiones o incluso la muerte.

Los síntomas comienzan como un resfriado común —congestión nasal, estornudos y fiebre baja—, pero evolucionan a una tos intensa y prolongada, a menudo con un sonido característico tipo «gallo» o «silbido» al inspirar. Esta tos puede durar varias semanas e interferir con la alimentación y el sueño. La enfermedad se puede prevenir mediante vacunas, como la DPT o Pentavalente, aplicadas en varias dosis durante la infancia.

Fiebre amarilla

En 2025, se han confirmado 4 casos de fiebre amarilla en Ecuador, todos en provincias amazónicas. Aunque no se han registrado casos en Pichincha, el Ministerio de Salud Pública ha intensificado las medidas de prevención en la provincia, incluyendo la vacunación masiva y el control vectorial.

La fiebre amarilla es una enfermedad viral aguda transmitida por la picadura de mosquitos infectados, principalmente del género Aedes en zonas urbanas y Haemagogus en áreas selváticas. El virus causa síntomas iniciales como fiebre alta, dolor muscular, dolor de cabeza, náuseas y fatiga.

En alrededor del 15% de los casos, la enfermedad progresa a una fase tóxica, en la que pueden presentarse ictericia (coloración amarilla de piel y ojos), hemorragias internas, falla hepática o renal y, en muchos casos, la muerte. La letalidad en esta etapa puede alcanzar entre el 20% y 40%. No existe un tratamiento específico, por lo que la prevención mediante vacunación y control del mosquito vector es fundamental para evitar brotes.