Pacientes renales reclaman al Gobierno el pago a las clínicas de diálisis cuya deuda ya asciende a 160 millones de dólares.
La falta de pagos a las clínicas de diálisis por parte del Gobierno hace que los pacientes renales tengan una lucha aparte. No solo deben lidiar con la enfermedad sino también con la escasez de insumos esenciales que pone en riesgo sus vidas. Hasta enero de este año, la deuda ascendía a 160 millones de dólares. Mientras tanto, los pacientes claman por atención.
Para este viernes 21 de febrero, los pacientes renales realizarán un plantón en diferentes ciudades del país. El reclamo estaba previsto inicialmente para la ciudad de Quito, pero con el pasar de los días, pacientes de diferentes ciudades del país se han sumado a esta iniciativa. Así, el plantón se replicará en Quito, Guayaquil, Quevedo y Manta.
Al evento pacífico en la ciudad están convocados los pacientes con insuficiencia renal, sus familiares y amigos. Se realizará frente al Municipio, a partir de las 10h00. Se espera además la llegada de pacientes de otros cantones de Manabí.
Gabriela Álvaro, paciente que fue diagnosticada en 2016 con esta enfermedad crónica, lidera la convocatoria en Quito. Mencionó que el incumplimiento del pago pone en riesgo su vida y al de más de 20 mil pacientes a nivel nacional.
Más de mil pacientes renales murieron en 2024 en el país
Según datos del Ministerio de Salud Pública de Ecuador, en noviembre de 2022 se registraron 21.394 personas en el Registro Ecuatoriano de Diálisis y Trasplante (REDT). La tasa de prevalencia de la enfermedad renal crónica en Ecuador para 2022 fue de 1.182,77 pacientes por millón de habitantes, lo que equivale aproximadamente al 0,12% de la población ecuatoriana estimada para ese año.
Aunque no se dispone de cifras exactas para 2025, es probable que la cantidad de pacientes renales en Ecuador haya aumentado debido al crecimiento poblacional y a factores de riesgo como la diabetes y la hipertensión. Solo en 2024, más de mil personas fallecieron por falta de tratamiento. La insuficiencia renal crónica es reconocida como un problema de salud a nivel mundial, y en Ecuador representa una carga significativa para el sistema de salud.