El Metro de Quito acumula tres días consecutivos con retrasos y aglomeraciones. Usuarios expresan frustración por demoras, falta de información y trenes sin horario fijo.
Desde el 5 de mayo, el Metro de Quito presenta retrasos constantes en su servicio, especialmente en estaciones del sur de la ciudad, afectando a miles de pasajeros en horas pico. La falta de información oficial ha generado creciente molestia entre los usuarios, algunos de los cuales evalúan dejar de utilizar el sistema.
Retrasos reiterados y escasa información
Durante la mañana del 7 de mayo, en la estación Quitumbe, se repitieron las escenas de los días previos: trenes que no salen a tiempo, andenes llenos y ausencia de información clara por parte del personal operativo.
Una pasajera explicó que el tren que usualmente parte a las 07:10 salió con más de 10 minutos de retraso. Otros usuarios señalaron que el tiempo de espera en Morán Valverde superó los 15 minutos. «La gente llega tarde al trabajo y no puede justificarlo. No hay ni señal para enviar un mensaje», dijo otra usuaria afectada.
Desde el lunes 5 de mayo, se registran inconvenientes operativos que no han sido explicados por la empresa administradora del sistema de transporte subterráneo.
Incidente previo y falta de respuestas ante retrasos en el Metro
El 6 de mayo, un día después del inicio de las fallas, se reportó un incidente en la estación La Magdalena, donde una puerta de tren no cerró correctamente. Esto obligó a evacuar el vagón y provocó filas extensas de pasajeros en la plataforma.
Aunque no se ha confirmado una relación directa entre ambos eventos, los usuarios perciben una disminución en la calidad del servicio y demandan respuestas de la empresa operadora.
Hasta la publicación de esta nota, no se ha emitido ningún comunicado oficial explicando los motivos de los retrasos o informando sobre soluciones técnicas o logísticas.
Impacto en la confianza del usuario por retrasos en el Metro
La falta de información oportuna ha deteriorado la percepción del sistema. Varios pasajeros consultados coincidieron en que están considerando volver al transporte convencional, a pesar de los costos o tiempos adicionales.
“Si esto sigue así, mejor vuelvo a usar el bus. El Metro parecía una solución, pero ahora solo genera estrés”, comentó un usuario que viaja diariamente desde el sur.
Los pasajeros también se preguntan si hay menos trenes operando o si hay problemas técnicos no comunicados, lo que estaría afectando la frecuencia y la capacidad operativa del sistema.
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Contexto del sistema de transporte
El Metro de Quito, inaugurado oficialmente en diciembre de 2023, es el principal proyecto de transporte masivo de la capital. Su operación ha estado marcada por interrupciones técnicas, pruebas prolongadas y ajustes operativos.
Este sistema fue diseñado para transportar hasta 400.000 pasajeros diarios y aliviar el tráfico en el eje norte-sur. Sin embargo, la reciente inestabilidad operativa pone en duda su fiabilidad en el mediano plazo.
La ciudadanía exige una respuesta institucional transparente, soluciones técnicas inmediatas y un plan de contingencia que evite nuevos colapsos en el sistema.
