Una planta de papas fritas estaba en la mira de las autoridades y este viernes 31 de mayo del 2024 la clausuraron.
El operativo se desarrolló en la ciudad de Cuenca, en la provincia del Azuay, informaron representantes de Arcsa.
Se conoció que se trataba de una planta procesadora de papas fritas, chifles, maní de sal, maní de dulce y otros snacks.
Según la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) se clausuró la planta de papas fritas por condiciones de insalubridad.
La entidad a cargo del operativo no especificó el nombre de la empresa ni tampoco las marcas que distribuía.
Sí detalló que había «materia prima en contacto directo con el piso, acumulación de agua con tintura amarilla, canaletas sin rejilla y paredes con grasa».
Entre otras novedades que se encontraban estaban «equipos sucios sin mantenimiento y producto terminado listo para empacar en envases no aptos para el almacenamiento de alimentos».
Planta de papas fritas y otros productos
Estas condiciones eran favorables para el ingreso de plagas como roedores, especificó Arcsa en un comunicado.
El control también permitió evidenciar «el uso de colorante amarillo para dar color a las papas fritas (chips y en palito)».
Según Arcsa el uso de dichos químicos debe estar declarado en la etiqueta por tratarse de un alérgeno y ser un derecho del consumidor conocer toda información de un alimento procesado antes de consumirlo.
La planta procesadora estará clausurada hasta que se garanticen las condiciones de higiene en la elaboración de estos alimentos.
El pasado 16 de mayo, la Arcsa también clausuró una planta procesadora de snacks porque se hallaron heces de ratón.
Aquello también ocurrió en la ciudad Cuenca y tampoco se informó la marca y los productos que vendía.
La planta de papas fritas en Cuenca no volverá a operar hasta que se realicen mejoras en sus instalaciones y que cumplan con los estándares de calidad.
