Este martes 22 de abril, unos 60 cardenales se reunieron en la Ciudad del Vaticano para celebrar la primera Congregación General, una sesión a puerta cerrada destinada a tratar temas cruciales de la Iglesia Católica tras el fallecimiento del Papa Francisco, en preparación para el cónclave que elegirá al próximo pontífice.
Juramento y normas de la Sede Vacante
En la reunión, los cardenales juraron observar la Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis, documento que regula los procedimientos durante la Sede Vacante y el cónclave. La sesión se desarrolló en un ambiente de estricta confidencialidad, según informó Vatican News. Este juramento compromete a los purpurados a mantener el secreto sobre las deliberaciones y a seguir las normas establecidas para la elección del nuevo Papa.
La Congregación General es una de las primeras etapas formales que cumple el Vaticano tras la muerte de un pontífice. En ella, los cardenales discuten cuestiones administrativas, organizativas y espirituales de la Iglesia. Además, se encargan de preparar los detalles logísticos del cónclave, como la seguridad y el alojamiento de los participantes.
Contexto de la Reunión en el Vaticano
La Sede Vacante comenzó tras el fallecimiento del Papa Francisco, un evento que ha captado la atención mundial. Durante este periodo, el Colegio Cardenalicio asume la responsabilidad de gobernar temporalmente la Iglesia, aunque sin autoridad para tomar decisiones doctrinales. La Congregación General, según fuentes vaticanas, también permite a los cardenales reflexionar sobre los desafíos actuales de la Iglesia, como la evangelización, la unidad interna y los problemas sociales globales.
Organización y participación
La reunión contó con la participación de cardenales de diversas regiones, reflejando la universalidad de la Iglesia Católica. Aunque no se divulgaron detalles específicos sobre los temas tratados, se sabe que las Congregaciones Generales continuarán en los próximos días hasta que se fije la fecha del cónclave. Este proceso puede durar entre 10 y 15 días, dependiendo de la complejidad de los asuntos pendientes.
Los cardenales electores, aquellos menores de 80 años, tendrán la tarea de elegir al próximo Papa en el cónclave. Actualmente, el Colegio Cardenalicio cuenta con 126 cardenales electores, según datos oficiales del Vaticano. La diversidad geográfica de los participantes asegura una representación global en las deliberaciones.
Próximos pasos en el Vaticano
Las Congregaciones Generales son esenciales para garantizar una transición ordenada en la Iglesia. En las próximas sesiones, se espera que los cardenales discutan el perfil del futuro pontífice y las prioridades para su pontificado. Mientras tanto, el Camarlengo, encargado de administrar los asuntos temporales de la Santa Sede, supervisa las operaciones diarias del Vaticano.
La atención mundial está puesta en el Vaticano, ya que el resultado del cónclave definirá el rumbo de la Iglesia Católica en los próximos años. Hasta que se elija al nuevo Papa, las Congregaciones Generales seguirán siendo el principal espacio de diálogo y preparación para los cardenales.