En 24 de Mayo, Manabí, el 85.4% de los habitantes vive en pobreza, según el INEC. La familia Sancan Cedeño enfrenta carencias extremas en 2025. Las lluvias y la falta de empleo agravan su situación.
Pobreza extrema en cifras
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) revela que cinco cantones de Manabí sufren alta pobreza: Flavio Alfaro con 85,2%, Paján con 89%, Pichincha con 86,1%, Olmedo con 93,6% y 24 de Mayo.
En este último, el 85,4% de la población tiene escasos recursos. La familia Sancan Cedeño refleja esta realidad. Bella Cedeño, de 87 años, y su nieto de 37 años, con discapacidad, viven sin dinero en una casa de caña y madera en la carretera principal. Sobreviven con menos de tres dólares diarios. Las lluvias del invierno dañaron su humilde vivienda, intensificando sus dificultades.
Bella, viuda y sin trabajo, nunca aprendió a leer ni escribir. Forma parte del 11,9% de la población analfabeta en 24 de Mayo. Su hija, Lilian Cedeño, antes dedicada a despicar maní, perdió su ingreso por la mecanización. Ahora, venden gallinas o huevos para subsistir. “No tenemos trabajo, no sabemos cómo seguir”, dice Lilian con mucho pesar.
El impacto del invierno en los humildes
El invierno convirtió la vida de los Sancan Cedeño en una pesadilla. Norma Sancan, otras de las hijas de Bella, contó cómo el agua convirtió su entorno en un “río”. Las quebradas llegaron hasta su hogar, y la casa humilde temblaba por la corriente. Bella, por su edad, no pudo salir sola. Vecinos la rescataron cuando el agua bajó. “La casa tambaleaba, parecía caerse”, relató Norma. Esta situación expone la vulnerabilidad de las familias sin dinero en 24 de Mayo, donde las viviendas precarias no resisten el clima.
Además, la falta de infraestructura agrava la pobreza. El acceso limitado a servicios básicos y empleo mantiene a estas comunidades en desventaja. La mecanización desplazó a trabajadores como Lilian Sancan, dejando a familias sin trabajo y con escasos recursos.
Analfabetismo en Manabí
La pobreza por Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI) afecta desproporcionadamente a Manabí. Según el INEC, los cinco cantones mencionados enfrentan carencias severas. En 24 de Mayo, el 11,9% de analfabetismo refleja barreras educativas. Aunque la pobreza NBI ha disminuido a nivel nacional, según estudios de la Universidad de Cuenca, en estos cantones persisten problemas estructurales. La falta de empleo, infraestructura deficiente y desastres naturales complican el panorama.
La pobreza persiste
Iniciativas locales, como eventos educativos, buscan generar esperanza. Sin embargo, la pobreza sigue dominando. Las familias humildes, como los Sancan Cedeño, dependen de actividades esporádicas e inestables, como vender huevos, para sobrevivir. La ausencia de políticas efectivas perpetúa el ciclo de carencias.
A pesar de los esfuerzos comunitarios, la pobreza persiste en 24 de Mayo. Las familias sin trabajo y con escasos recursos enfrentan un futuro incierto. Sin soluciones estructurales, los humildes de este cantón seguirán luchando contra la precariedad diaria. MV