El Consejo Cantonal de Protección de Derechos (CCPD-P) construirá cuatro rampas accesibles en Portoviejo para diciembre de 2025, en colaboración con Portovial, para mejorar la movilidad de los grupos vulnerables, según Wilmer Macías.
El Consejo Cantonal de Protección de Derechos (CCPD-P) de Portoviejo impulsa un proyecto para construir cuatro rampas accesibles en paradas de buses antes de finalizar 2025, según informó Wilmer Macías, analista en protección de derechos. La iniciativa, desarrollada junto a representantes de grupos vulnerables y Portovial, busca facilitar el acceso al transporte público para personas con discapacidad, adultos mayores y otros sectores prioritarios.
Las rampas se instalarán en puntos estratégicos de alta afluencia: la Universidad Técnica de Manabí (UTM), el Hospital de Solca, el Hospital del IESS (avenida Manabí). También en la entrada principal de la Universidad San Gregorio. Macías explicó que estas ubicaciones fueron seleccionadas por el elevado flujo diario de personas. La construcción estará a cargo de Portovial y cumplirá con las normas INEN de accesibilidad, aunque no se especificaron detalles sobre el diseño o los materiales.
El proyecto contempla estas cuatro rampas como un primer paso, con una meta a futuro de implementar 20 paradas inclusivas en el cantón durante la actual administración municipal. Esta planificación refleja un compromiso con la accesibilidad universal en Portoviejo.
Voces de la comunidad
Sandra Vélez, de la Asociación de Ciegos de Manabí, destacó el impacto positivo del proyecto para los grupos vulnerables. “Esperemos que se cumpla, porque será de gran ayuda para quienes tenemos una discapacidad y para adultos mayores”, comentó. Sin embargo, señaló que Portoviejo aún no es una ciudad plenamente inclusiva, debido a obstáculos en las calles y la falta de sensibilización ciudadana, que considera esencial.
María Macías, comerciante cerca del Hospital de Solca, respaldó la iniciativa, pero pidió resolver problemas previos en la zona. Según ella, las placas metálicas que conectaban la calzada con la vereda fueron robadas, causando caídas. “Es perfecto, pero primero deben reponer esas placas”, afirmó.
Estas opiniones subrayan la importancia de complementar las rampas con mejoras integrales en la infraestructura y educación para garantizar una movilidad segura e inclusiva.
Contexto de la accesibilidad en Portoviejo
Portoviejo, capital de Manabí, enfrenta desafíos para garantizar la accesibilidad de sus espacios públicos. Especialmente para los grupos vulnerables identificados que incluyen personas con discapacidad, adultos mayores, mujeres embarazadas y otros. Proyectos como este, alineados con las normas INEN y las políticas nacionales de inclusión, buscan reducir las barreras físicas y sociales en el cantón.
La colaboración entre el CCPD-P y Portovial es un paso hacia una ciudad más equitativa, pero, como indicó Vélez, la sensibilización social será clave para su éxito. La meta de 20 paradas inclusivas a largo plazo refuerza el compromiso municipal con la movilidad accesible, respondiendo a las necesidades de la comunidad.