El Registro Civil de Ecuador debe mejorar con urgencia su capacidad de atención a los ciudadanos. No es comprensible que persistan las demoras de semanas o incluso meses para obtener turnos para la emisión de cédulas de identidad o pasaportes, documentos esenciales para la identificación de las personas y, también, para múltiples trámites y actividades.
Cada día, miles de personas requieren estos servicios para gestiones laborales, bancarias, académicas o de salud; en muchos casos, también los necesitan para viajar por motivos familiares o de emergencia. La espera prolongada no solo genera molestias, sino que puede perjudica los derechos y oportunidades de los usuarios.
El Estado, a través del Ejecutivo, debe incorporar este tema a su agenda prioritaria de modernización institucional. Se requieren más recursos, mejor gestión y tecnologías que permitan ampliar la cobertura y agilizar un proceso tan vital como este.
También es necesario garantizar transparencia, evitar la intermediación indebida y dar facilidades de acceso a personas de los grupos vulnerables.
El Registro Civil, como institución de servicio que maneja un recurso tan importante como la identidad de los ciudadanos, debe estar a la altura de las necesidades del país. La eficiencia en su servicio es una obligación.