A Gabriela Alexandra G. N., la condenaron a siete años de pena privativa de libertad por «coyotera« de migrantes en Chimborazo, Ecuador. El Tribunal Penal, tras un juicio unánime, ordenó además una reparación económica de 4.208 dólares a la víctima, a quien la deportaron desde la frontera entre México y Estados Unidos.
El 21 de mayo de 2025, un Tribunal Penal de Chimborazo dictó una sentencia unánime contra Gabriela Alexandra G. N., supuesta «coyotera» condenándola a siete años de prisión. Esto por su autoría en el delito de tráfico ilícito de migrantes, conocida c. La sentencia oral, emitida tras un proceso iniciado en 2023, también ordenó a la sentenciada pagar 4.208 dólares como reparación a la víctima y ofrecer disculpas públicas. Esto mediante una publicación en un medio impreso.
La investigación comenzó en febrero de 2023, cuando la víctima, un hombre de Riobamba que enfrentaba problemas económicos, denunció a la supuesta «coyotera» Gabriela Alexandra G. N. A través de amigos, el denunciante la conoció y ella le ofreció llevarlo ilegalmente a Estados Unidos, una actividad a la que, según la Fiscalía, se dedicaba de manera habitual. Acordaron un pago inicial de 2.500 dólares, que la víctima entregó para iniciar el viaje.
El 7 de enero de 2023, el hombre partió desde Riobamba hacia Tulcán junto con otros migrantes.
Le exigieron el pago
Durante el trayecto, la «coyotera» Gabriela Alexandra G. N., exigió un pago adicional de 2.400 dólares a un familiar del denunciante. Esta suma la depositaron en una cuenta a nombre de una persona que supuestamente esperaba al grupo en México. Tras varios días de viaje, los migrantes llegaron a Tapachula, México, donde se les entregaron visas mexicanas falsas para intentar ingresar a Estados Unidos. Sin embargo, al denunciante lo detuvieron en la frontera entre México y EE. UU. y lo deportaron.
Los créditos
Además, se incluyeron informes sobre los créditos adquiridos por la víctima para pagar a los coyoteros, lo que ilustró el impacto económico del engaño. La Fiscalía también demostró que Gabriela Alexandra G. N., formaba parte de una red más amplia de tráfico de migrantes. Aunque no se revelaron detalles sobre otros involucrados para no comprometer investigaciones en curso. La combinación de estas pruebas llevó al Tribunal a emitir un fallo unánime.
El Juez ponente destacó la gravedad del caso, señalando que el tráfico ilícito de migrantes no solo pone en riesgo la vida de las víctimas, sino que también perpetúa un ciclo de explotación y deuda. La reparación económica de 4.208 dólares busca compensar parte de las pérdidas sufridas por el denunciante, quien, según los informes de la Fiscalía, tuvo que recurrir a préstamos para cubrir los pagos exigidos por la red de coyoteros. (27)