La clave de la operatividad y mantenimiento de las carreteras del Guayas está en un modelo que cumple 27 años: el 74% (616 kilómetros) de la red vial de la provincia está concesionada.
Son 14 peajes y un servicio 24/7 de grúas, ambulancias, médicos y choferes, explica Joffre Jalil Intriago, director de concesiones de la Prefectura del Guayas. El GAD provincial mantiene las vías concesionadas a las empresas Conorte S.A. y Concegua S.A. Ambas comparten el mismo accionista: Hidalgo & Hidalgo. Los contratos están vigentes hasta 2026.
Para la Prefecta del Guayas, Marcela Aguiñaga, a partir del próximo año se buscará un nuevo modelo. “No haré renovación directa de concesiones, creo que las alianzas público-privadas son un modelo interesante. Ahora el Estado pone el capital, hace la vía y la administra un tercero. ¿Cuál es la ganancia que tienen los guayasenses? La empresa privada tendrá que invertir en las vías para ampliarlas (de 2 a 4 carriles) y poner tecnología”.
Un modelo de concesión vial establecido en 1998
Actualmente, Conorte administra siete estaciones de peaje y un pontazgo (pago por pasar sobre un puente). Y Concegua, seis estaciones de cobro. “La participación del sector privado en la administración y mejora de las vías ha garantizado su operatividad y seguridad”, explica Gabriel Cedeño, experto en vialidad y gestión pública.
El modelo se estableció en 1998 y comenzó a operar en 2000. Desde entonces, han pasado cinco prefectos de distintas tendencias políticas: Nicolás Lapentti, Jimmy Jairala, Carlos Luis Morales, Susana González y Marcela Aguiñaga. El esquema vial ha prevalecido, aunque con matices.
Batalla legal contra las concesionarias en Guayas
La exprefecta González, por ejemplo, inició una batalla legal contra las concesionarias. Según ella, estas debían invertir $500 millones en obras de 2000 a 2020, pero no lo hicieron. La Prefectura de Guayas ha ganado ocho de nueve procesos judiciales contra Concegua y Conorte.
Además, el GAD provincial anunció el cobro de multas por USD 34 millones. Incluso, la Contraloría hizo un examen especial.
“En Guayas se busca mejorar el modelo. Obviamente no es perfecto. Se han hecho decenas de auditorías. El control siempre será vital. Pero se evita que la misma entidad pública cobre directamente un peaje”, apunta Gabriel Cedeño. Él considera que el sistema de concesión a la empresa privada -en términos claros de beneficio para ambas partes y sobre todo a la ciudadanía- evita la corrupción.
Algunos peajes son usados como caja chica
Cedeño agrega que “en los peajes hay dinero a diario y en efectivo. Eso puede ser usado como caja chica, para las urgencias del GAD provincial o incluso para desviar fondos”. Se refiere a que, por ejemplo, la Prefectura de Manabí ha usado los fondos recaudados por los peajes para pagar sueldos u otros gastos administrativos.
“Aunque prometan que luego lo reponen, usar ese dinero es absolutamente ilegal. Crean empresas públicas para administrar un peaje, cuando una concesión a la empresa privada dará mejores resultados y evitará gastos de personal, mantenimiento y engordar la burocracia”.
Para Joffre Jalil, es un tema de transparencia y eficiencia: garantizar las mejores vías y un auxilio inmediato en caso de requerirse, así como labores periódicas de limpieza, reparación de pavimentos y señalización.
Prefectura del Guayas se plantea la revisión de contratos
Entre los planes de la administración de Aguiñaga consta: “Revisar contratos con concesionarios para incluir la construcción de puntos o espacios para descanso de transportistas a fin de reducir los accidentes de tránsito y generar áreas de interés turístico y productivo”. Es decir, el siguiente paso es instaurar servicios integrales (estaciones de combustible, restaurante, entretenimientos y demás servicios) como las autopistas de EE.UU. o Europa.
Las 14 estaciones de peaje en Guayas generan ingresos anuales por $90 millones. Los fondos se destinan a fideicomisos para el mantenimiento y modernización de las vías concesionadas.
Las concesiones en Guayas tienen dos ejes: Norte, que abarca 360,61 kilómetros y Guayas Oriental, de 255,40 kilómetros. (36)
Por Allen Panchana.