En medio de la polémica por las preguntas de la nueva consulta popular propuesta por el presidente Daniel Noboa, la ministra de Trabajo, Ivonne Núñez, salió al frente para defender uno de los temas más controversiales: el contrato por horas en el sector ligado al turismo.
Durante una entrevista emitida este 5 de agosto de 2025 en el canal Teleamazonas, Núñez afirmó que “es necesario el trabajo por horas”. Esto, en referencia a la pregunta cinco de la consulta popular y referendo que se prevé ejecutar a finales de 2025. Según la funcionaria, esta modalidad laboral no solo responde a la realidad del sector turístico, sino que se enmarca dentro de un esquema legal con garantías claras para los trabajadores.
“Se cumplirán con todas las obligaciones que deben efectuarse por parte de los empleadores, como la afiliación al Seguro Social, el pago de décimos y vacaciones”, enfatizó Núñez. Además, recalcó que esta modalidad aplicará únicamente a quienes inician su vida laboral y que no vulnera derechos adquiridos.
¿Qué plantea la pregunta sobre trabajo por horas?
La propuesta fue presentada el 5 de agosto por el presidente Daniel Noboa, a través de sus redes sociales. Dentro del paquete de siete preguntas que conforman la nueva consulta popular, la número cinco detalla lo siguiente:
¿Está usted de acuerdo con permitir la contratación laboral por horas, únicamente para el sector de turismo, siempre que se trate de la primera relación laboral, garantizando los derechos laborales y respetando los derechos adquiridos de los trabajadores, enmendando la Constitución de conformidad con el anexo de la pregunta?
Este cambio implicaría una enmienda constitucional y reformas específicas al Código de Trabajo. La ministra indicó que ya se está trabajando en los detalles técnicos para sustentar esta propuesta en caso de aprobación.
Un tema que vuelve a consulta tras el rechazo ciudadano
La pregunta sobre el trabajo por horas ya fue planteada en el referendo del 21 de abril de 2024. En ese momento una mayoría de ecuatorianos votó por el “No”. Aquella propuesta buscaba habilitar esta modalidad de forma más amplia, aplicable a cualquier sector y tipo de contrato inicial entre empleador y trabajador.
En esta nueva ocasión, el Gobierno matiza el planteamiento, limitándolo exclusivamente al sector turístico y sólo si se trata de la primera contratación laboral del ciudadano. La ministra Ivonne Núñez defendió este giro como una respuesta técnica a las necesidades del sector. Hizo énfasis en temporadas altas donde la demanda de mano de obra es intermitente.
“No se trata de precarizar el empleo, sino de abrir oportunidades formales en un sector que lo necesita”, argumentó Núñez durante su intervención.
¿Qué cambia y por qué importa?
La defensa de esta propuesta por parte del Ministerio de Trabajo busca dar garantías ante un tema que ha generado resistencia en amplios sectores sociales. El énfasis está en que no se eliminarán derechos, sino que se buscará adaptar el marco legal a nuevas realidades productivas, comenzando con el turismo, un sector clave para la reactivación económica.
Este intento por retomar una reforma laboral a través del mecanismo de consulta popular representa tanto un desafío político como jurídico. Lo que está en juego no es solo el contenido de la pregunta, sino la credibilidad del Gobierno para implementar reformas sin debilitar la protección al trabajador.