Los países del Mercado Común del Sur (MERCOSUR) acordaron este viernes en Argentina priorizar e impulsar negociaciones comerciales con socios “relevantes” para la segunda mitad de 2025. La decisión se tomó en un contexto de incertidumbre global, marcado por la guerra arancelaria impulsada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y los retrasos en la ratificación del acuerdo comercial con la Unión Europea.
Los ministros de Exteriores del bloque, reunidos en un ambiente de “cordialidad y confianza”, subrayaron la necesidad de modernizar la alianza y fortalecer la integración regional frente a un comercio internacional “dinámico y desafiante”. El encuentro, el segundo en menos de un mes, sirvió para analizar las perspectivas de integración y avanzar en la eliminación de restricciones comerciales internas. Los cancilleres destacaron el progreso en negociaciones con Emiratos Árabes Unidos y la Asociación Europea de Libre Comercio, además de recalcar la importancia del acuerdo con la UE, concluido en diciembre pero aún pendiente de ratificación debido a reticencias de países como Francia.
Nuevos horizontes comerciales
La reunión reflejó el interés del MERCOSUR por diversificar sus socios comerciales en un escenario global volátil. Los ministros abogaron por acelerar diálogos con países “comercialmente relevantes”, aunque no se especificaron nombres en el comunicado oficial. Esta estrategia busca contrarrestar las tensiones derivadas de las políticas proteccionistas de Estados Unidos y las demoras en el pacto con la UE, que promete liberalizar el comercio transatlántico.
El bloque también acordó consolidar cadenas de valor y armonizar normativas internas para facilitar el comercio intrarregional. Estas medidas, según el comunicado, responden a la necesidad de adaptar el MERCOSUR a una coyuntura internacional en constante cambio, caracterizada por barreras comerciales y reconfiguraciones geopolíticas.
Modernización e integración regional
Los cancilleres enfatizaron la urgencia de modernizar la alianza sudamericana, creada en 1991, para hacerla más competitiva. La eliminación de restricciones comerciales dentro del bloque fue un punto central, con el objetivo de fortalecer la integración económica entre Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Bolivia, este último en proceso de adhesión plena. Además, se discutieron iniciativas para mejorar la infraestructura y la conectividad regional.
Aunque el comunicado no mencionó directamente a Trump, las referencias a un comercio internacional “desafiante” aluden implícitamente a las políticas arancelarias impulsadas por su administración. Estas han generado preocupación en el MERCOSUR, cuya economía depende en gran medida de las exportaciones agrícolas y de materias primas.
Contexto y desafíos del acuerdo con la UE
El acuerdo con la Unión Europea, negociado durante dos décadas, sigue siendo un pilar estratégico para el MERCOSUR. Sin embargo, su ratificación enfrenta obstáculos en Europa, donde países como Francia expresan temores por el impacto en su sector agrícola. Los cancilleres del bloque reiteraron su compromiso con el pacto, destacando su potencial para abrir mercados y fomentar inversiones.
La reunión de Buenos Aires también sirvió para reafirmar el rol del MERCOSUR como actor clave en el comercio global. Los países coincidieron en que la diversificación de socios y la modernización interna son esenciales para mantener la relevancia del bloque.
Con esta hoja de ruta, el MERCOSUR busca posicionarse como un bloque ágil y competitivo, capaz de navegar los desafíos del comercio internacional. Las decisiones tomadas serán clave para definir el rumbo del bloque en 2025, en un año que se prevé crucial para las relaciones comerciales globales.
km