La reconocida diseñadora María del Mar Proaño, a sus 42 años, vuelve a captar la atención, pero esta vez no por sus creaciones en la moda, sino por su incansable búsqueda del amor. Tras tres matrimonios y un divorcio finalizado en enero de 2025, la creativa nacida en Machala mantiene su fe en encontrar el amor de su vida. ¿Por qué sigue apostando por el matrimonio? Porque, como ella misma dice, “no me gusta estar sola”.
María del Mar no es nueva en los titulares de la farándula ecuatoriana. Con una carrera de más de 15 años en el diseño, ha vestido a celebridades y brillado en pasarelas, pero su vida personal siempre ha sido un imán para las cámaras. Sus matrimonios con Mario Aguirre (2016), Christian Bernal (2021) y un tercer matrimonio que culminó este año han sido noticia. Sin embargo, lejos de cerrarse al amor, ella asegura: “Claro que me voy a volver a casar. Todavía no conozco al novio, pero ¡lo haré!”.
En una entrevista reciente con diario Extra, la diseñadora confesó que, aunque ha enfrentado infidelidades y traiciones, no permite que el dolor la detenga. “Yo no sirvo para sufrir. Cuando empiezo a ser muy infeliz, simplemente me retiro”, afirmó con una sonrisa que refleja su fortaleza. Su historia resuena con muchos que, como ella, han vivido desilusiones pero no pierden la esperanza.
María del Mar tiene el sueño de un hogar
Madre de un joven de 23 años, María del Mar se describe como una mujer de valores tradicionales, influenciada por su madre y abuela. “Me encanta el hogar, cocinar, celebrar cenas. Tengo ese lado de ama de casa súper metido”, reveló en redes sociales, donde sus seguidores aplauden su autenticidad. Su mayor anhelo es construir un hogar sólido junto a alguien que sea “fiel, bueno y su amigo”.
A pesar de estar soltera actualmente, María del Mar no se queda quieta. Con una vida social activa y varios pretendientes, asegura que no se conformará con menos de lo que merece. “Quiero alguien con quien envejecer, con quien construir algo bonito”, compartió.
Lecciones de las pasarelas y el corazón
La vida amorosa de María del Mar no está exenta de comparaciones. En Ecuador, figuras como María Teresa Guerrero y Cinthya Coppiano, quienes también enfrentaron un divorcio, han optado por mensajes de paz al cerrar ciclos amorosos. Sin embargo, lo que hace única a Proaño es su valentía para volver a intentarlo.
Un futuro lleno de esperanza
Con Guayaquil como su escenario, María del Mar sigue creando, no solo moda, sino también sueños. Aunque admite que las heridas del pasado no son fáciles, su optimismo es contagioso. “No quiero algo pasajero. Quiero un compañero para toda la vida”, sentencia. Mientras diseña su próxima colección, también diseña su futuro, uno donde el amor verdadero tenga el protagonismo.