Múltiples avistamientos de peces remo, apodados “peces del juicio final”, han captado la atención mundial por su aparición simultánea en costas de Nueva Zelanda, Australia y la India entre mayo y junio de 2023. Estos ejemplares, conocidos por su cuerpo serpente y su asociación histórica con catástrofes naturales, han generado fascinación y especulaciones, aunque la ciencia descarta cualquier vínculo premonitorio.
En Nueva Zelanda, dos peces remo sin cabeza fueron hallados en las playas de Dunedin y Christchurch, en la Isla Sur. Casi en paralelo, un ejemplar apareció en Tasmania, Australia, y pescadores de Tamil Nadu, India, extrajeron un coloso de nueve metros del océano. Estos eventos, extremadamente raros, han avivado debates en redes sociales y entre expertos marinos, señala una publicación de la revista National Geographic.
Pez remo y su hábitat
El pez remo, el pez óseo más largo del planeta, habita en zonas pelágicas a profundidades de 200 a 1.000 metros, donde las condiciones extremas dificultan su estudio. Según John Pogonoski, biólogo marino del CSIRO, Australia ha registrado solo 70 ejemplares en bases científicas, mientras que Nueva Zelanda documenta apenas 20. El profesor Nick Ling, de la Universidad de Waikato, subraya la dificultad de investigar estas criaturas debido a su hábitat inaccesible.
Las redes sociales han amplificado el aura mítica del pez remo. En India, el ejemplar fue nombrado “pez Pralaya”, aludiendo al apocalipsis en el hinduismo. En Tasmania, fotos compartidas por Sybil Robertson en Ocean Beach desataron comentarios virales, como uno que los llamó “heraldos del apocalipsis”. Su apariencia, con un cuerpo iridiscente que va del plateado al carmesí y aletas escarlatas, refuerza su imagen fantasmagórica.
Las creencias sin sustento científico
La creencia de que estos peces presagian desastres, como terremotos, carece de sustento científico. En 2011, varias apariciones precedieron el terremoto y tsunami de Tohoku, Japón, alimentando especulaciones. Sin embargo, Neville Barrett, del Instituto de Estudios Marinos de la Universidad de Tasmania, afirma: “No hay evidencia concluyente que relacione estos eventos”. Barrett explica que los peces remo solo emergen si están enfermos o desorientados, y su muerte suele pasar desapercibida en el fondo marino, agrega National Geographic.
Kiyoshi Wadatsumi, director de e-PISCO y especialista en sismología ecológica, señala que los peces de aguas profundas podrían ser más sensibles a movimientos de fallas activas, pero esto no implica una conexión directa con catástrofes. Los científicos coinciden en que los avistamientos son coincidencias, no señales apocalípticas.
Halo de misterio
A pesar de las explicaciones racionales, el pez remo sigue envuelto en un halo de misterio. Su desplazamiento ondulante y su rareza lo convierten en un símbolo de lo desconocido. Como destaca Barrett, estos eventos subrayan cuán poco sabemos sobre los abismos oceánicos, que cubren gran parte del planeta.
Los recientes avistamientos no anuncian el fin del mundo, pero sí invitan a reflexionar sobre los enigmas del océano profundo. Mientras la ciencia desentraña sus secretos, el pez remo seguirá fascinando y alimentando la imaginación colectiva. (10)