Más de 21.000 habitantes de Fertisa, Suburbio Oeste, Guasmo Sur y Norte accederán a talleres gratuitos y espacios de organización barrial tras la intervención del Municipio de Guayaquil, que ejecuta un proceso de inspección y legalización de 42 casas comunales. Las acciones iniciaron en julio y forman parte del plan de fortalecimiento del tejido social urbano.
Intervención municipal en barrios populares
El proceso está a cargo de la Dirección de Vinculación con la Comunidad, que verifica el estado físico, la legalidad y la logística de los espacios. Muchas de estas casas comunales no contaban con registro municipal ni condiciones adecuadas, lo que limitaba su uso como centros de aprendizaje o puntos de encuentro vecinal.
Con la regularización, se habilitarán talleres de formación dictados por personal técnico municipal, enfocados en habilidades productivas, tales como costura, carpintería, enfermería, soldadura y otros oficios, según la demanda de los sectores.
“Ahora con esta nueva Alcaldía hemos visto muy buenos beneficios. Necesitamos mejoras en esta casa comunal y que se den cursos de enfermería y soldadura para jóvenes”, expresó Candelario Corozo, morador de Guasmo Sur, durante una inspección reciente.
Más de 9.400 mujeres se capacitan en emprendimiento en Guayaquil durante 2025
Espacios seguros y con uso regulado
La municipalidad busca que estas casas comunales funcionen con permisos actualizados, estructuras seguras y objetivos definidos. La intervención incluye mejoras físicas menores cuando son necesarias, así como la articulación con otros programas municipales relacionados con cultura, educación, recreación y salud preventiva.
Con esta etapa, Guayaquil sumará 134 casas comunales activas. Cada una de ellas será habilitada como un centro comunitario con oferta formativa, actividades recreativas y espacio para la participación barrial. Estas acciones responden a una estrategia de inclusión y convivencia impulsada desde el cabildo porteño.
Reconstrucción del tejido social y generación de oportunidades
En los sectores donde opera esta iniciativa, el municipio ha identificado altos niveles de desempleo, escaso acceso a formación técnica y baja participación ciudadana. La recuperación y dinamización de las casas comunales es parte de una política pública orientada a generar nuevas oportunidades económicas y fortalecer la identidad colectiva en barrios tradicionalmente olvidados.
Además de los cursos, estos espacios permitirán desarrollar asambleas barriales, ferias ciudadanas y actividades intergeneracionales que promuevan la cohesión vecinal. Se priorizan los sectores del sur y suroeste de Guayaquil por su densidad poblacional y situación socioeconómica.
Una red en expansión con impacto comunitario
El plan de expansión continuará en los próximos meses con la revisión de otras casas comunales en el norte y centro de la ciudad. Se prevé que el número de beneficiarios aumente conforme se consolide la red de formación.
La estrategia incluye alianzas con fundaciones, instituciones educativas y organizaciones civiles que puedan fortalecer la oferta de talleres. Cada casa comunal tendrá un cronograma de actividades y cupos determinados según su capacidad instalada.