En el marco de la solemnidad de San Pedro y San Pablo, el Papa León XIV elevó un llamado urgente para que cesen los conflictos armados en todo el mundo y se retome el camino del diálogo como vía para alcanzar la paz. El mensaje fue pronunciado durante el tradicional rezo del Ángelus de este domingo 29 de junio, en la Plaza de San Pedro, ante miles de peregrinos provenientes de diversas partes del mundo.
El Pontífice centró su intervención dominical en la necesidad de silenciar las armas y trabajar por la paz, reiterando su cercanía con los pueblos afectados por la violencia y el sufrimiento. “Sigamos rezando para que en todas partes callen las armas y se trabaje por la paz a través del diálogo”, expresó.
Cercanía con Ucrania y víctimas en África
Durante su alocución, el Papa manifestó palabras de afecto hacia los peregrinos ucranianos, a quienes dirigió una muestra de apoyo espiritual en medio del conflicto armado que sigue afectando al país. “Rezo siempre por su pueblo”, indicó el Pontífice.
Además, expresó su pesar por la explosión ocurrida en el liceo Barthélemy Boganda de Bangui, en la República Centroafricana, donde 29 personas perdieron la vida y decenas resultaron heridas. El Papa pidió oraciones por las víctimas y sus familias, en una tragedia que ha generado conmoción internacional.
Llamado a la unidad eclesial en la festividad de San Pedro y San Pablo
En ocasión de la solemnidad de los santos Pedro y Pablo, patronos de la Iglesia de Roma, León XIV dirigió un mensaje especial a los sacerdotes de su diócesis, reafirmando el carácter unificador de su ministerio. “Mi servicio episcopal es servicio a la unidad, y la Iglesia de Roma está comprometida, por la sangre de los santos Pedro y Pablo, a servir en el amor y la comunión entre todas las Iglesias”, declaró.
El Papa subrayó que esta fecha representa no solo una conmemoración litúrgica, sino una renovación del compromiso pastoral con la comunión universal de la Iglesia. Enfatizó que la unidad eclesial es indispensable para que la Iglesia sea “casa y escuela de comunión” en un mundo marcado por la fragmentación y el conflicto.
Actividades conmemorativas: peregrinación urbana en Roma
León XIV también se refirió a los participantes del evento ‘Quo Vadis?’, una iniciativa que incluyó dos rutas de peregrinación urbana: una de 13,6 km y otra de 7 km, por lugares emblemáticos asociados a la memoria de San Pedro y San Pablo. El Papa bendijo a los caminantes y celebró el sentido espiritual de esta actividad, que busca fortalecer la fe y el conocimiento histórico-religioso.
La actividad, organizada por la diócesis de Roma, tuvo como objetivo vincular a los fieles con la herencia espiritual de los dos apóstoles mártires, cuya vida y testimonio siguen siendo ejemplo de fidelidad al Evangelio.
Un mensaje para el mundo
Al concluir el Ángelus, el Papa invocó la intercesión de San Pedro, San Pablo y la Virgen María, pidiendo por la sanación del mundo herido por el conflicto, la pobreza y la desunión. Reiteró que la Iglesia debe mantener su vocación de ser “un espacio de encuentro, reconciliación y caridad fraterna”.
El llamado de León XIV se produce en un contexto de tensión geopolítica internacional, con múltiples focos de conflicto activo, así como crisis humanitarias agravadas por la violencia, la migración forzada y los desastres naturales.
Conclusión
El mensaje dominical del Papa León XIV fue un llamado a la reflexión, la paz y la comunión entre los pueblos y las Iglesias. A través de sus palabras, renovó el papel de la Iglesia como instrumento de unidad y esperanza en un mundo necesitado de reconciliación. La Santa Sede mantiene su compromiso de acompañar espiritualmente a las naciones en crisis y promover una cultura global de diálogo y no violencia.
