En el corazón de Guayaquil, miles de peatones y conductores que recorren diariamente la avenida 9 de Octubre disfrutarán pronto de una vía más iluminada y con una estética renovada. El Municipio de Guayaquil adjudicó un contrato de USD 269.000 para modernizar el sistema de alumbrado público de este corredor estratégico, que conecta el puente 5 de Junio con el Malecón 2000. Los trabajos, que comenzarán en cuatro semanas y durarán 120 días.
La intervención incluye el reemplazo de 350 luminarias por tecnología LED de alta eficiencia y la instalación de 40 nuevos postes. Además, los faroles definitivos adoptarán un diseño colonial que armonizará con el entorno histórico. Actualmente, la avenida depende de un sistema de iluminación obsoleto, con luces LED y de sodio de más de diez años que generan una luz tenue.
Según el municipio, el nuevo sistema LED reducirá el consumo energético en un 40% y mejorará la visibilidad nocturna, reforzando la seguridad para los 14.000 peatones y 60.000 vehículos que transitan diariamente. Como medida provisional, el Municipio instaló luminarias temporales que ya han incrementado la iluminación en horarios nocturnos.
Un proyecto con antecedentes en iluminación
El Municipio de Guayaquil ha implementado proyectos similares en los últimos años, con la repotenciación del alumbrado público. En enero de 2025, la Alcaldía lanzó un plan intensivo de mantenimiento y repotenciación de luminarias en sectores como Urdesa, Alborada y la vía Perimetral, con una inversión superior a USD 7 millones de dólares.
En la avenida 9 de Octubre, específicamente, se realizaron nueve intervenciones puntuales en 2025, incluyendo el mantenimiento entre Quito y José de Antepara el 31 de marzo. Además, en julio de 2024, el cabildo reemplazó 34 luminarias LED de 90W y añadió 48 nuevas, restaurando la iluminación en tramos clave.
La Avenida 9 de Octubre no es solo una arteria vial; es un símbolo cultural y turístico de Guayaquil. Conecta plazas, edificios históricos y zonas comerciales, atrayendo a miles de visitantes. La iluminación moderna no solo mejorará la experiencia nocturna, sino que también disuadirá actividades delictivas, un factor clave en áreas de alto tránsito.
El diseño colonial de los nuevos faroles, además, recuperará la estética histórica de la avenida, alineándose con la identidad patrimonial de Guayaquil. Este enfoque combina funcionalidad y tradición, potenciando el atractivo turístico de la ciudad. La finalización de los trabajos, prevista para octubre de 2025, coincidirá con las celebraciones por la independencia de Guayaquil.
El proyecto en la avenida 9 de Octubre es parte de una estrategia más amplia para modernizar Guayaquil. El cabildo ya planifica intervenciones en otras arterias clave, como la avenida Quito y la autopista Narcisa de Jesús, según anuncios oficiales.
