Val Kilmer, uno de los actores más carismáticos y versátiles de Hollywood, falleció a los 65 años debido a complicaciones por neumonía. La noticia fue confirmada por su hija, Mercedes Kilmer, quien lo describió como un padre valiente en su lucha contra el cáncer de garganta. La enfermedad le fue diagnosticado en 2015. En su última aparición pública, el actor tenía programado asistir a una alfombra roja en el Festival de Cine de Beverly Hills. Allí habría celebrado el estreno de un nuevo documental sobre su carrera. La noticia de su muerte ha causado una ola de reacciones de sus colegas más cercanos en la industria cinematográfica.
Val Kilmer y una carrera de éxitos
Val Kilmer es reconocido por su amplia carrera que abarcó desde papeles protagónicos hasta interpretaciones secundarias que se ganaron el cariño del público. Entre sus películas más famosas se incluyen «Top Gun» (1986), donde interpretó a Iceman, un personaje que se convirtió en un ícono de la cultura pop. Uno de sus papeles destacados fue en «Batman Forever» (1995), donde dio vida al caballero oscuro. Sin embargo, Kilmer también destacó por su versatilidad, participando en películas de diversos géneros, como la comedia «Top Secret!» (1984), el drama histórico «The Doors» (1991), y el western «Tombstone» (1993).
Un hombre con una personalidad única
Más allá de su talento actoral, Kilmer era conocido por su temperamento y su intensa dedicación a los personajes que interpretaba. Durante las grabaciones de algunas de sus películas, su energía creativa a menudo causaba tensiones en los sets. También inspiraba a otros actores a dar lo mejor de sí mismos. Nicolas Cage recordó recientemente su colaboración con Kilmer en «Bad Lieutenant». Cage lo describió como un actor excepcional con un profundo sentido del humor y un compromiso total con su trabajo. Por otro lado, Michael Mann, quien trabajó con él en «Heat» (1995), expresó en un comunicado su admiración por la amplitud y profundidad del personaje que Kilmer logró crear en sus papeles.
Homenajes de la industria del cine a Val Kilmer
Francis Ford Coppola compartió en su cuenta de Instagram un mensaje recordando la genialidad de Kilmer desde sus inicios en la escuela de actuación, y destacó cómo su talento siguió creciendo con el paso de los años. Josh Brolin también se despidió de él a través de una emotiva publicación, mencionando lo difícil que fue perder a un amigo tan valioso. Josh Gad, conocido por su trabajo en películas como «Frozen», también recordó a Kilmer como una figura icónica de su infancia.
Un actor que superó obstáculos
Val Kilmer luchó contra un diagnóstico de cáncer de garganta que le fue diagnosticado en 2015, una batalla que marcó su vida personal y profesional. A pesar de las dificultades, el actor nunca perdió su pasión por la vida ni por el cine. En 2021, Kilmer participó en el documental «Val», una retrospectiva de su carrera que también abordó sus años de lucha contra la enfermedad y cómo logró mantener su espíritu artístico vivo a pesar de las adversidades.
Recuerdos compartidos por colegas
Los recuerdos compartidos por los colegas de Kilmer muestran una imagen de un hombre carismático y único en su oficio. David Thewlis, quien compartió set con él en «La isla del Dr. Moreau» (1996). Thewlis recordó los momentos extraños pero memorables vividos durante el rodaje de la fallida película. Para Thewlis, esos cinco meses en la selva australiana fueron una experiencia «desoladora pero maravillosa». Años después, Kilmer se convirtió en uno de los compañeros más queridos por quienes trabajaron con él.
El recuerdo de un actor querido
El Top Gun Official en X (anteriormente Twitter) también rindió homenaje a Kilmer, rememorando su icónica participación como Iceman en la película de 1986. La cuenta de la famosa película lo describió como una figura cuyo impacto en la cultura del cine trasciende generaciones. La huella de Kilmer no se limita solo a su participación en estas películas de culto; su trabajo como Jim Morrison en «The Doors» sigue siendo una de las interpretaciones más apreciadas de su carrera, convirtiéndolo en una figura fundamental en la historia del cine estadounidense.
Val Kilmer y un desarrollo que marcó época
Val Kilmer nació en Los Ángeles, California, el 31 de diciembre de 1959. Desde joven, mostró interés por el arte y la actuación, debutando en el teatro antes de dar el salto al cine. Su primer papel en una película importante fue en «Top Secret!», pero fue su interpretación en «Top Gun» la que realmente lo catapultó al estrellato. A lo largo de su carrera, Kilmer no solo se destacó como actor, sino también como escritor y pintor, mostrando su creatividad en diversas formas de expresión artística.
Kilmer siempre fue un hombre de contrastes: mientras su carrera le permitió convertirse en uno de los actores más conocidos de Hollywood, su personalidad excéntrica y su complejidad interna lo hicieron un enigma tanto para la prensa como para sus compañeros de trabajo. Fue un hombre que luchó tanto con sus demonios internos como con la enfermedad, pero que dejó una huella imborrable en cada uno de los proyectos en los que participó.
Un poco de historia y su crecimiento
El Hollywood de las décadas de 1980 y 1990 vivía una época dorada marcada por los blockbusters y el carisma de sus grandes estrellas. Fue en este contexto que Val Kilmer llegó a la industria, en un momento crucial en el que películas como Top Gun y Batman Forever acaparaban la atención de la taquilla mundial.
Su debut cinematográfico en la comedia Top Secret! lo presentó como un actor con gran talento humorístico. Sin embargo, su participación en Top Gun (1986) lo catapultó al estrellato, convirtiéndolo en un nombre reconocido a nivel internacional. En 1988, amplió su rango interpretativo al participar en Willow, una película de fantasía dirigida por Ron Howard que recaudó 57.3 millones de dólares, consolidando su atractivo en el género.
El papel de Kilmer como Doc Holliday en Tombstone (1993) destacó su habilidad para encarnar personajes complejos, dándole vida a un pistolero tuberculoso en una cinta que generó 56.5 millones de dólares en taquilla. Este éxito, junto con su participación en Heat (1995), compartiendo escena con leyendas como Al Pacino y Robert De Niro, reafirmó su versatilidad como actor. A lo largo de su carrera en los años noventa, trabajó con directores de prestigio como Michael Mann y Oliver Stone, acumulando un legado de interpretaciones memorables que lo mantuvieron en la cima del cine hasta finales de esa década.