Este 10 de junio de 2025, la Asamblea Nacional de Ecuador vota la Ley de Inteligencia, una propuesta que genera incertidumbre y preocupación entre varias bancadas, incluyendo Pachakutik, Partido Social Cristiano (PSC) y Revolución Ciudadana, debido a artículos que podrían afectar la privacidad y la libertad de expresión. La aprobación de la normativa no tiene garantizados los 77 votos necesarios.
Ley de inteligencia: diversas bancadas
La Ley de Inteligencia, impulsada por la bancada de Acción Democrática Nacional (ADN), llega al Pleno de la Asamblea Nacional con una aprobación incierta. Diversas bancadas han expresado dudas y reparos sobre su contenido, especialmente en lo referente a la protección de datos y la privacidad ciudadana. La sesión está prevista para las 15:00 de este martes 10 de junio.
Preocupaciones por la privacidad
La segunda vicepresidenta de la Asamblea, Carmen Tiupul, parte del grupo de Pachakutik aliado al oficialismo, expresó inquietudes. “Observamos que no se ponen límites a temas como la reserva de datos y la privacidad de los ciudadanos”, afirmó Tiupul. Esta declaración subraya la falta de una postura definida de su bancada, a pesar de la cercanía con el oficialismo. La polémica ha llevado a la bancada de ADN a mantener silencio, sin declaraciones de sus asambleístas ni de la presidenta de la Comisión de Seguridad, Inés Alarcón.
Artículos polémicos y críticas
Asambleístas de otras bancadas han detallado los artículos que consideran inaceptables. Alfredo Serrano, del Partido Social Cristiano (PSC), señaló que unos cinco artículos son “imposibles de apoyar” y “tiran abajo la intención de la ley”. Entre estos, mencionó la interceptación de llamadas sin orden judicial, la apertura de correspondencia virtual o física sin este requisito y la solicitud de información a las telefónicas sin orden judicial, calificándolos de “gravísimos”.
La legisladora Victoria Desintonio, de Revolución Ciudadana, comparte estas preocupaciones. Destacó su inquietud por los artículos que establecen una entidad rectora con rango de ministerio, pero que no especifican cuál será la entidad ni sus responsables. El correísmo teme que la norma sea una herramienta de persecución política y que atente contra la libertad de expresión y la prensa. Desintonio advirtió sobre la posibilidad de que se solicite información a los medios de comunicación sin orden judicial, afectando el trabajo periodístico.
Propuesta para un voto por bloques
A pesar de las críticas, tanto los correístas como los socialcristianos y Pachakutik reconocen la necesidad de una Ley de Inteligencia. Consideran que la mayor parte de la propuesta de la Comisión de Seguridad es positiva. Sin embargo, estiman que alrededor de un 10% de los 58 artículos de la normativa resultan inaceptables.
Por ello, estas fuerzas políticas proponen votar el proyecto por bloques en lugar de en su totalidad. Esperan que el presidente de la Asamblea, Niels Olsen, les conceda la palabra para plantear esta posibilidad. Si esta idea no es acogida, la Ley de Inteligencia podría convertirse en el primer revés para el Gobierno en el actual periodo legislativo.