Desde el 9 de junio de 2025, el deporte, especialmente el fútbol profesional ecuatoriano vive un cambio histórico en su forma de organización con la figura de Sociedades Anónimas Deportivas (SAD). La Asamblea Nacional aprobó la Ley Orgánica de Solidaridad Nacional, que permite a los clubes profesionales convertirse o migrar a esta modalidad.
Hasta ese momento, los equipos funcionan como asociaciones sin fines de lucro, donde los socios tenían igual poder de decisión sin importar su aporte económico, lo que limita la inversión y profesionalización. Esta reforma legal, en voces de expertos, abre la puerta para que los clubes operen como empresas, con accionistas que asumen el control proporcional a su inversión y la posibilidad de obtener ganancias.
Horacio Cedeño, experto en Administración de Empresas en Gestión Deportiva y con un masterado en Gestión Deportiva en la Universidad Europea de Madrid explica cómo esta transformación busca sanear las finanzas, atraer inversión privada y modernizar la gestión deportiva en Ecuador. Cedeño también destaca que esto presenta retos en la relación con los socios tradicionales y la identidad de los clubes.
Horacio Cedeño sobre las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD)
¿Qué es una sociedad anónima deportiva?
Bueno, una sociedad anónima en general es una persona jurídica mercantil donde el capital societario se divide en acciones. Básicamente la sociedad anónima deportiva, la SAD, que es lo que se está buscando ahora, se basa en la misma naturaleza de cualquier sociedad anónima, pero con el objeto único que es el deporte. Es decir, relacionada 100% únicamente al deporte.
Es decir, pasan a ser sociedades en las cuales el fin se divide en acciones y son con fines de lucro, a diferencia de los clubes actuales y los que existen. Hay clubes de alto rendimiento, profesionales, formativos, barriales, etc.
Son clubes sin fines de lucro y que prácticamente le pertenecen a los socios. Entonces ese es el significado en general de la sociedad anónima deportiva.
¿Cuál sería el propósito principal de permitir que los clubes del fútbol ecuatoriano o cualquier tipo de equipo o club se convierta en una SAD?
Principalmente hay que entender que el deporte, al igual que cualquier otro tipo de empresa o negocio o de actividad, al pasar del tiempo —digamos que esto pasa hace mucho tiempo—, el deporte comenzó como un objeto social deportivo en el cual el bien principal era promover el hacer el deporte, pero con el tiempo el deporte ha sido comercializado.
Entonces el deporte a día de hoy nos ha demostrado y nos ha llevado —le ha llevado a la ciudadanía— a darse cuenta que es una actividad que genera lucro y por ende, por medio de un club, al no ser con fines de lucro, todo lo que se hace, en teoría, se reinvierte. Lo que hacen las sociedades anónimas deportivas básicamente es eso, de que el empresario que vea el deporte como un negocio en el que puede lucrar, se involucre y por medio de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) pueda generar esta actividad, con un lucro mayor
¿Pueden las SAD participar en actividades distintas que no sean el fútbol?
Claro que sí. Las Sociedades Anónimas Deportivas son para cualquier tipo de deporte, no solamente el fútbol, definitivamente. Claro está de que la gente lo asocia mucho porque los que más lo hablan, o mejor dicho, la actividad más explotada en el Ecuador es el fútbol y eso lo tenemos muy claro. Creo que de un mundo de clubes existentes, el 60% al menos son de fútbol y el resto de otros deportes. Entonces la gente mira mucho hacia allá, más incluso hablando de que el fútbol es el deporte más profesionalizado en el Ecuador.
Entonces es donde tú ves mayor lucro, donde ves mayor movimiento económico, etc. La gente lo linkea mucho al fútbol, pero claramente las SAD pueden ser para el deporte que sea, pues básquet, golf, tenis. O sea, esto está abierto a que cualquier tipo de deporte pueda ser involucrado en Sociedades Anónimas Deportivas, totalmente.
¿Puede esto potenciar estos otros deportes?
Totalmente. Yo lo he dicho siempre, en pensamiento personal, porque he hablado con muchos empresarios buscando inversión en negocios propios del deporte. Yo estoy involucrado no solamente con fútbol, sino también con otros deportes. Y siempre el empresario que no está muy unido al deporte, o digamos así, que no lo ve como un aficionado, cuando tú le demuestras que puede involucrarse y generar dinero, tienen su reparo porque no tienen seguridad jurídica. Al haber las SAD, estoy seguro que más de un empresario lo van a comenzar a ver como un negocio por la seguridad jurídica.
Hablemos del proceso de transformación, ¿qué pasos deben seguir los clubes para transformarse en una Sociedad Anónima Deportiva (SAD)?
Bueno, yo creo que eso va a ser lo más complicado. El tema más complejo es porque primero que nada tiene que haber un acuerdo, porque a día de hoy los clubes existentes les pertenecen a los socios, y estoy hablando de una base mínima de 25, pero hay clubes existentes a día de hoy que tienen más de 10.000 socios activos. Entonces imagínate, poner acuerdo a todo el mundo para que sea una sociedad anónima no va a ser fácil.
Igual, también hay que tener en cuenta que en los clubes que hayan acuerdos entre los socios y que están dispuestos a que se conviertan en una SAD, va a ser mucho más fácil.
Insisto, todo dependerá de cada caso. En todo caso, seguramente no todos, porque no es una obligación que todos los clubes se conviertan en una Sociedad Anónima Deportiva, pero una gran parte de los clubes van a querer serlo.
La infraestructura jurídica como tal no está, pero, ¿qué cree usted? ¿Es necesario o se debería refundar un club o solo transformarlo en un SAD?
O sea, yo creo que las dos opciones son válidas. Un club con mucha historia es muy complicado refundar, porque definitivamente esa historia es la que marca el camino. Esto va a pasar en Ecuador por primera vez, aquí en Sudamérica, ya está en Chile y no sé si está en algún otro país más. Por ejemplo, yo te puedo dar la historia de España. El Atlético de Madrid es un club que es mixto.
Es 51% SAD y 49% club que le pertenece a los socios. Claro, al haber cedido los socios a que esto exista es porque el club estaba por desaparecer por deudas. Los involucrados como socios en esta SAD plasmaron dentro de los estatutos que para ellos poder invertir ese 51% tenía que tomar las decisiones absolutas a nivel económico y jurídico. Y este otro 49%, temas basados en afición, escudo, bandera, himno, hinchada, pero las decisiones trascendentales las toma la SAD.
Pero claro, ¿por qué adoptó el Atlético de Madrid esto y no adoptó el crearse o refundar el club? Porque esa historia no la puedes dejar atrás. Esto yo creo que va a complicar más a los clubes que tienen mucha historia. Porque yo creo que los clubes que no tienen historia o son nuevos ,y se quieren volver SAD, es mucho más fácil. O sea, imagínate Barcelona SC, Liga de Quito, Emelec, que el día de mañana tomen la decisión de volverse SAD. No va a ser fácil. Y así mismo tienes el ejemplo del Real Madrid, del FC Barcelona, que seguramente en su momento lo intentaron, pero son tantos los socios que nunca pudieron conseguirlo. Y siguen siendo clubes, no SAT.
Entonces, algo parecido creo que va a pasar en el Ecuador. Creo que va a ser una historia replicada.
¿Quién debería decidir si un club se transforma en una sociedad anónima? ¿Solo los socios, la directiva o una entidad externa?
No, eso es un tema netamente interno, siempre y cuando haya un acuerdo de los socios, que actualmente, como te digo, son los dueños del club. Ellos son los encargados en conjunto con la directiva, que normalmente esa directiva son socios del club, en tomar las decisiones en una asamblea. No un órgano externo.
Actualmente el Ministerio del Deporte, solo regula jurídicamente a los clubes (…) Sus estatutos, sus directorios, registros de nuevos directorios. Pero definitivamente ningún ente externo puede venir y decirte puedes o no puedes hacerlo. Eso va a depender netamente de las decisiones internas del club existente.
Al transformarse en sociedad anónima los controles de entidades es mayor, ¿cómo o qué nivel de dificultad pudiera existir allí ?
Bueno, claramente a día de hoy los clubes son vigilados jurídicamente por el Ministerio del Deporte. Las sociedades anónimas deportivas entran al ecosistema de la Superintendencia de Compañías, por tal razón automáticamente tienen como ente regulador de revisar no solamente el tema jurídico, de que el representante legal esté vigente, de que tengas que hacer un cambio en tus documentos porque cambia el representante legal, etc. No solo en términos jurídicos.
Acordémonos que la Superintendencia también revisa tus balances económicos y financieros. O sea, estamos hablando de que seguramente la regulación sobre la SAD va a ser mucho más exhausta que la que los clubes tienen sobre todo porque generan un usufructo. Tanto los clubes como la SAD tienen al SRI por encima. Pero la diferencia es que tú como SAD ahora sí vas a generar utilidad. Igualmente el SRI está mucho más por sobre ello porque en esa utilidad hay un mayor pago de impuestos. Entonces,
seguramente las regulaciones van a ser mucho más altas.
Tal cual como existe para cualquier sociedad anónima, va a existir para las Sociedades Anónimas Deportivas.
¿Cómo afecta la transformación de una sociedad anónima en los ingresos del club considerando derechos de televisión o patrocinios?
Que actualmente llegan directamente al club. En este caso, al pasar a una SAD, obviamente sería el grupo inversor al que llegaría. Los ingresos por derechos de televisión son iguales siendo club o sociedad porque al fin y al cabo, más allá del grupo inversor, van a la entidad como tal, es decir el club. Y obviamente ante eso hay un recurso que se usa, hay un presupuesto, etc.
Lo que sí creo es que al haber una inversión mucho más comercial, yo sí creo que de cierta forma van a haber muchos dueños de clubes que van a ver alternativas en derechos de televisión. Entonces por ahí quizás puede haber una diferencia. Pero de ahí en más hay un contrato firmado por derechos de televisión con los clubes que juegan LigaPro, Serie A y Serie B; si estos clubes cambian a SAD, tienen que regirse bajo lo que tienen ya firmado actualmente. Eso no lo puedes borrar, porque si cambias la figura se mantiene el contrato.
¿El nivel de complejidad de manejo financiero aumenta o sigue siendo el mismo?
Seguramente aumenta. No es lo mismo manejar un club sin fines de lucro donde todo es reinvertido en la misma institución, a cuando una institución genera fines de lucro. Esos montos que se generan pasan a terceros y esa utilidad genera un pago del impuesto mucho mayor. Yo que actualmente estoy gerenciando un club como Portoviejo FC y aparte soy gerente general de una compañía te puedo asegurar de que el trabajo es mucho más engorroso.
¿Cumpliría el corazón de esta Ley la intención de evitar lavado de activos, evitar evasión tributaria y todo lo demás como se ha planteado?
Bueno, la naturaleza de esta ley es esa y yo personalmente creo que si es lo que busca, se lo va a encontrar. Definitivamente hay muchos órganos de control en este caso y han podido disminuir estas prácticas por su control. Entonces, definitivamente creo que la SAD ayudaría.
Pero sobre todo creo que también ayudaría —hablando menos de lo malo— a que haya más plata buena dentro de la SAD porque definitivamente el empresario honrado va a ver su inversión más segura a diferencia de invertir en un club. Y también vamos a tener mucho más empresarios que inviertan su dinero en deporte y esto obviamente va a ayudar al crecimiento del mismo en general .
Ahora vamos al impacto de los socios, que sin lugar a dudas va a existir. ¿Qué pasa con ellos?
Va a depender mucho de los acuerdos internos para que exista una SAD. Los socios tienen que ceder definitivamente. Habrá clubes que decidan meter a estos socios como parte del paquete de acciones. Habrá accionistas o personas interesadas en ser accionistas, en tener el control absoluto del club y no contar con estos socios. Yo creo que cada club va a tener su historia y va a depender mucho de que quieran los socios.
Para los clubes pequeños va a ser mucho más fácil, porque son clubes que a día de hoy no son sostenibles, que por ahí les cuesta un poquito más mantenerse. Pero los clubes grandes como un Liga de Quito, un Emelec, un Barcelona SC, que tienen miles de socios decirles “ustedes van a dejar de tener voz y voto dentro del club”, ¿cómo le dices a ellos ya la decisión la vamos a tomar solamente dos o tres personas? No es tan fácil, entonces yo creo que va a ser complejo para los clubes con historia.
En una sociedad anónima deportiva ¿Quién concentra el poder? ¿Quién toma las decisiones a nivel de las que toma ahora la dirigencia de un club?
Bueno, en Sociedades Anónimas Deportivas, como cualquier sociedad anónima que exista actualmente, va a depender de sus accionistas. Dentro de esos accionistas escogen un representante legal, en este caso un gerente general, presidente, vicepresidente, dependiendo de la cantidad de personas que estén involucradas, y ellos toman, por así decirlo las decisiones determinantes, que son las decisiones financieras, jurídicas, que al final son las que sostienen el club globalmente.
Luego tienes tu equipo de trabajo, en las cuales tu confías, y toman decisiones que van a ser deportivas, administrativas, y que ya van más del día a día. Pero definitivamente las decisiones trascendentales las van a tomar los accionistas. Eso lo vemos en cualquier tipo de empresa.
¿Podrán los accionistas hipotecar bienes para obtener recursos a través de créditos con bancos? ¿Tienen todas estas potestades?
Por supuesto. Las sociedades anónimas tienen todas las potestades para hacer cualquier tipo de acuerdo con entidades privadas. Los acuerdos existen de auspicio, de publicidad, de sponsor, de todas las formas. O sea, un convenio con banco para pagos, préstamos mixtos, auspicios, todo lo que tiene que ver con empresa privada.
Hay quienes toman como referencia una mala experiencia que sucedió con Colo-Colo en Chile ¿qué opinión tiene usted?
Tú ves sociedades anónimas actuales, no relacionadas al deporte, que no han tenido éxito y básicamente es por malas decisiones. Yo creo que esto (las SAD) es bueno porque tenemos casos de éxito en todo el mundo, pero claramente no el 100% de los casos van a ser exitosos. Para Colo-Colo no lo fue. Para mí es el camino a seguir, ojo, sabiendo que los clubes deportivos aún existen. Si tú no crees en las Sociedades Anónimas Deportivas, sigue siendo un club profesional con socios porque la ley no dice que se acabaron los clubes, siguen existiendo.
Ahora tenemos una alternativa, que si tú me preguntas para mí es la mejor. Yo pienso como empresario. Capaz el día de mañana ves a un socio y te dice, no, me estás quitando un club, la pertenencia que tengo sobre el club, etcétera, etcétera, pero para mí es el camino a seguir. Así mismo como tú me nombras lo de Colo-Colo, te vuelvo a nombrar la historia de la Atlético de Madrid porque la conozco, soy hincha de ese club.
El Atlético de Madrid tenía un déficit de más de $60 millones y a día de hoy tiene un superávit gracias a esos cambios. Fue tormentoso inicialmente para los socios, pero una vez que se adaptaron y se dieron cuenta que el club tenía resultados, entonces el socio o el hincha se olvida. ¿Tú qué prefieres? ¿Sentirte que eres socio, que aportas y que al final es tu club, pero tienes un equipo con problemas, que no gana, que tiene deudas, que puede desaparecer? A luego saber que eres socio de un club que hay personas que están haciendo dinero de ese club, pero tiene resultados, no tiene problemas económicos, ficha, trae jugadores más llamativos. A la final el hincha debe entender que el fútbol es espectáculo, se tiene que vender.