El 26 de mayo, la Iglesia católica celebra a San Felipe Neri, sacerdote nacido en 1515 en Florencia, Italia, canonizado por su vida de santidad y fundación de la Congregación del Oratorio, cuya festividad conmemora su fallecimiento en 1595 en Roma, destacando su labor pastoral y caritativa.
Una vida dedicada al servicio
San Felipe Neri nació el 21 de julio de 1515 en Florencia, Italia, en una familia acomodada. A los 18 años, tras una experiencia espiritual, renunció a una carrera comercial y se trasladó a Roma en 1533, donde vivió como laico durante 17 años, dedicándose a la oración y la ayuda a los pobres.
Estudió filosofía y teología en la Universidad de La Sapienza y fue ordenado sacerdote en 1551, a los 36 años. Su vida estuvo marcada por un profundo amor a Dios y al prójimo, combinado con un carácter alegre y humilde.
San Felipe trabajó con jóvenes
En Roma, San Felipe Neri se destacó por su trabajo con los jóvenes y los necesitados. Fundó una confraternidad para atender a peregrinos y enfermos, gestionando un hospicio que llegó a albergar hasta 10.000 peregrinos al año durante los Jubileos.
Su carisma atraía a personas de todas las clases sociales, desde nobles hasta marginados, a quienes guiaba espiritualmente.
Fundó el Oratorio
Filosofía y espiritualidad de San Felipe Neri
Sus métodos pastorales, como las confesiones diarias y las charlas informales, hacían accesible la fe a los laicos. También fomentó la devoción al Espíritu Santo, celebrando misas con gran fervor. Documentos históricos relatan que experimentó éxtasis místicos, incluyendo un episodio en 1544 donde sintió su corazón agrandado por el amor divino.
Canonización y reconocimiento
San Felipe Neri fue canonizado por el papa Gregorio XV el 12 de marzo de 1622, junto con otros santos como Ignacio de Loyola y Teresa de Ávila. Su canonización se basó en su vida ejemplar y milagros, como curaciones atribuidas a su intercesión.
La Iglesia lo reconoce como patrono de los educadores, humoristas y Roma, y su influencia perdura en la espiritualidad oratoriana.
Celebración del 26 de mayo
La festividad de San Felipe Neri se celebra el 26 de mayo, fecha de su muerte en 1595 en Roma, según el Martirologio Romano.
Las iglesias oratorianas, especialmente la Chiesa Nuova en Roma, celebran misas solemnes y procesiones. En países como México, Filipinas y España, la devoción a San Felipe incluye novenas y actos litúrgicos que destacan su legado de alegría y servicio.
Legado perdurable de San Felipe Neri
Su legado se refleja en la Congregación del Oratorio, que sigue activa en la formación espiritual y educativa. Su enfoque en la música sacra influyó en compositores como Palestrina.
Es venerado como un modelo de evangelización alegre y cercana, inspirando a generaciones de sacerdotes y laicos. Su tumba en la Chiesa Nuova es un lugar de peregrinación.