La Primera Convención Nacional de Cacao y Chocolate: Innova Cacao EC 2025 se desarrolló este 18 de julio y continuará el 19 en Chone, Manabí, como una plataforma que reunió a productores, universidades, autoridades y expertos del sector con el objetivo de impulsar la innovación y el valor agregado del cacao ecuatoriano.
Un evento para recordar el origen y proyectar el futuro
Durante dos días, Chone será sede de una agenda nutrida que busca generar un diálogo técnico y cultural en torno al cacao. El evento fue organizado por la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí extensión Chone con respaldo del Ministerio de Turismo, el Ministerio de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, la Alcaldía de Chone, Banarriego, y el colectivo Manabí Gastronomía Milenaria.
El acto de apertura contó con la presencia de autoridades nacionales y provinciales, incluyendo al rector de la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí (ULEAM), prefectos, asambleístas, representantes municipales, productores, y miembros de la academia. La ingeniera Liseth Andrade, cofundadora del evento, destacó que Innova Cacao nace “para visibilizar a los campesinos y agricultores como protagonistas del cambio rural”.
Además de charlas técnicas y espacios de intercambio, la convención presentó los Reconocimientos “Gran Cacao” 2025, un homenaje cultural a quienes han dejado huella en la producción y promoción del cacao ecuatoriano.
Reconocimientos con raíz histórica y artesanal
La figura del “Gran Cacao” remite a la época de bonanza cacaotera de inicios del siglo XX, cuando los grandes productores dominaban la economía rural y marcaron un hito en la historia agrícola nacional. Esta premiación retoma ese concepto y lo resignifica, exaltando valores como la sostenibilidad, el conocimiento técnico y la identidad gastronómica.
Los reconocimientos se entregaron a cinco líderes del sector:
- Alberto Bravo Aveiga, como Gran Cacao Agricultor 2025, por su trayectoria en el cultivo.
- Julio Álvarez Coronel, Gran Cacao Gubernamental, por su respaldo institucional.
- Corporación Fortaleza del Valle, como Gran Cacao Asociatividad, por su modelo cooperativo exitoso.
- Orazzio Bellettini, cofundador de la Fundación Fuegos, en la categoría Gastronomía, Cultura y Patrimonio.
- Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí, como Gran Cacao Fomento Productivo, por su impulso académico a los viveros de cacao.
Cada galardón fue representado por una escultura única del artista Ricardo Alcívar, elaborada en madera de guayacán, con detalles en tagua y marfil vegetal, inspirada en la mazorca del cacao.
Intercambio técnico y académico con mirada productiva
El evento incluyó ponencias de alto nivel, enfocadas en tecnología agrícola, innovación y manejo de cultivos. El ingeniero Lenin Zhuma, experto cacaotero, destacó que el sector vive “un nuevo auge” gracias a la diversificación del producto y al creciente interés internacional.
Zhuma señaló que el futuro del cacao dependerá de un manejo técnico integral desde la siembra hasta la cosecha. “Si se lleva un control adecuado de poda, enfermedades y nutrición, el cacao puede ser un negocio altamente rentable”, aseguró.
Por su parte, el rector Marcos Zambrano resaltó el rol de las universidades para generar conocimiento y formar nuevos profesionales del agro. Afirmó que el cacao es ya el segundo producto de exportación del país, y que requiere mayor inversión en capacitación e infraestructura.
Creatividad, identidad y posicionamiento internacional
El cacao ecuatoriano no solo se exporta como materia prima, sino que ha comenzado a posicionarse como producto con valor agregado, gracias a su calidad genética y la creatividad de sus productores. Así lo explicó Orazzio Bellettini, quien recalcó el papel de la gastronomía en ese proceso de transformación.
“Es la creatividad del ecuatoriano lo que convierte al cacao en chocolate, bombones o productos cosméticos. Cada innovación cuenta y suma”, afirmó. Recordó además que Manabí ha sido reconocida como Región Gastronómica Mundial para el año 2026, lo que potencia su imagen como cuna del sabor.
Treces organizaciones nacionales del sector participaron activamente en la convención, dejando claro que este espacio ha llegado para quedarse. El evento buscó sembrar ideas y proyectar estrategias para consolidar una cadena de valor justa, inclusiva y sostenible.
Una agenda que unió campo, ciudad y conocimiento
Entre las charlas destacadas también se encontró la del Ing. Carlos Rovello, quien explicó cómo mejorar la productividad del cacao mediante sistemas de riego tecnificados. Su ponencia ofreció herramientas concretas para pequeños y medianos productores, que enfrentan retos como el cambio climático y la escasez hídrica. (30) MV.