Manabí. Inundaciones en Bolívar deja pérdidas cuantiosas en la economía local
Inundaciones y las intensas lluvias en Calceta, cabecera cantonal de Bolívar, han causado estragos en el comercio y la agricultura, dejando pérdidas económicas cuantiosas y afectando gravemente a sus habitantes.
Las inundaciones provocadas por el desbordamiento de los ríos Mosca y Carrizales han sumido a Calceta, cabecera cantonal de Bolívar, en una crisis económica y social. Comerciantes y agricultores reportan cuantiosas pérdidas tras las lluvias que azotaron la región desde el lunes, cuando el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) cantonal declaró la alerta roja. Mientras las aguas siguen afectando amplias zonas, los damnificados buscan alternativas para sobrevivir en medio del desastre.
Comercio en crisis: Negocios paralizados por la inundación

La crisis climática ha golpeado duramente a quienes dependen del comercio en Calceta. Flora Meza, propietaria de un negocio de comida, reporta que las inundaciones han dificultado el acceso a su local, lo que ha reducido drásticamente su clientela. “Pierdo entre $30 y $40 dólares diarios porque no puedo abrir”, lamenta Meza.
Productos dañados por el agua

En la entrada de la ciudadela Betania, Narcisa Mendieta relató con un nudo en la garganta la inundación que afectó su hogar. Con la voz quebrada, expresó el miedo y la tristeza que sintió al ver cómo gran parte de sus productos se perdieron en el agua.
“Cuando los carros pasaban, se formaban olas que llegaban hasta dentro de la casa. Mojó todos los cartones que tenían productos y las refrigeradoras”, añadió Narcisa, aún afectada por las inundaciones que se mantienen desde el lunes.
Emprendimientos afectado por el desbordamiento del río Mosca

Situaciones similares se repiten en toda la zona. Carlos Molina, quien abrió recientemente un negocio de comidas rápidas en la ciudadela Divino Niño, sufrió daños irreparables en sus insumos tras el desbordamiento del río Mosca. “Perdí gran parte del material: pollo, papas, chuzos y otros ingredientes. Ahora la gente no entra a la ciudadela porque el agua sigue estancada”, explica Molina.
A pesar de sus intentos por recuperar algo de su inversión, la situación sigue siendo crítica, mencionó el joven.
Pérdidas en productos y animales de crianza por inundaciones

Otro caso es el de María Delgado, dueña de una tienda en la misma ciudadela. Productos básicos como arroz, harina y papel higiénico resultaron afectados. Cuando el nivel del agua subió, mojó todo a su paso. Actualmente trató de poner los productos a buen recaudo sin embargo ya no abre su tienda.
Sumando a su pérdida económica, la inundación de la madrugada del lunes acabó con sus animales de crianza, incluyendo un cerdo y varias aves de corral. “También contaba con esos ingresos. Los pollos y el cerdo eran una ayuda extra para mi economía, pero el agua acabó con sus vidas y ya no tengo nada”, mencionó con tristeza.
Agricultores: cultivos destruidos y futuro incierto

Si bien el comercio está afectado, el sector agrícola enfrenta un panorama aún más crítico. Néstor Cedeño, agricultor de la zona, destaca que la cantidad de cultivos perdidos es incalculable. “Tenía sembrado cacao, café, limón, yuca y maní, pero ahora todo está bajo el agua”, relata.
Los agricultores dependen de sus cosechas para su sustento, y la destrucción de estas pone en riesgo su estabilidad económica. “Nos quedamos sin productos para vender. No sabemos con qué dinero podremos sobrevivir”, agrega Cedeño.
Con la persistencia de las lluvias y la imposibilidad de recuperar los cultivos a corto plazo, los agricultores enfrentan la posibilidad de endeudamiento o migración en busca de alternativas laborales.
Alerta roja y medidas de emergencia
El COE cantonal de Bolívar declaró la alerta roja el lunes, tras el desbordamiento del río Mosca, que dejó más del 60% de Calceta bajo el agua. La situación se agravó la madrugada del jueves, cuando el río Carrizales también se desbordó, aumentando el área afectada.
Sofía Saldarriaga P.