A las 20h00 del viernes 29 de agosto, familiares de los privados de libertad de la cárcel de varones nº2 de Esmeraldas protagonizaron una protesta en el sur de la ciudad, bloqueando parcialmente una vía que conecta con el complejo industrial de la Refinería y otras empresas de la zona. Los manifestantes exigían mejores condiciones de trato para los reclusos, alegando maltratos, falta de medicinas y hacinamiento. La Policía Nacional intervino para despejar la vía y controlar la protesta.

Origen de la protesta

La protesta tuvo lugar cerca de las 20h00 del viernes 29 de agosto, cuando un grupo de familiares de los reclusos se congregó en el sector Lucha de los Pobres, al sur de Esmeraldas. La manifestación se centró en el bloqueo parcial de la vía que conecta con la Refinería Termoesmeraldas y otras instalaciones industriales de la zona. Según el informe de ECU911, la protesta fue organizada principalmente por mujeres que exigían un trato más humano para sus familiares privados de libertad, quienes se encuentran en condiciones críticas dentro del Centro de Rehabilitación Social de Varones de Esmeraldas.

Los manifestantes bloquearon la carretera utilizando maderos y llantas encendidas, lo que generó dificultades en el tránsito hacia las empresas de la zona. La intervención de servicios policiales fue inmediata para despejar el paso y evitar alteraciones al orden público.

Condiciones críticas en la cárcel de varones

El descontento de los familiares de los reclusos proviene de las condiciones de hacinamiento y la falta de atención médica en el centro penitenciario. Según datos de la Defensoría del Pueblo, la cárcel de Esmeraldas alberga a 1.552 reclusos, cuando su capacidad máxima es de 1.100 personas. Este hacinamiento ha generado una situación insostenible, en la que la atención a los reclusos no es adecuada.

Además, la situación de salud dentro del centro es preocupante. Se ha reportado que 10 reclusos padecen de tuberculosis, mientras que un total de 57 adultos mayores se encuentran privados de libertad en condiciones inadecuadas. Incluso uno de estos adultos mayores requería un traslado urgente debido a su estado crítico de salud.

Denuncias de maltratos y falta de insumos

Uno de los puntos más criticados por los familiares es la falta de medicinas y alimentos adecuados. Los reclusos han denunciado que los insumos básicos como alimentos y medicinas son insuficientes, lo que ha agravado aún más las condiciones de vida dentro del centro carcelario. A esto se suman las requisas exhaustivas que se realizan para verificar el ingreso de artículos prohibidos, lo que genera tensiones entre los privados de libertad y el personal de seguridad.

Los familiares aseguran que, además de la falta de recursos, hay constantes abusos y maltratos dentro del recinto penitenciario. Según ellos, los reclusos viven en un ambiente de violencia psicológica y física, lo que ha exacerbado la preocupación por su bienestar.

Respuesta de las autoridades de Esmeraldas

El ECU911 informó que el comando policial Subzona Esmeraldas se movilizó rápidamente al lugar de la protesta, logrando despejar la vía a la Refinería tras varios minutos de bloqueo. La policía también se encargó de controlar la aglomeración de personas en la zona, con el objetivo de restablecer el orden y permitir el flujo vehicular normal.

El Instituto de Rehabilitación Social y la Defensoría del Pueblo están al tanto de las denuncias realizadas por los familiares y reclusos. Aunque la respuesta institucional no ha sido inmediata, se espera que se tomen medidas para abordar la situación dentro de la cárcel, como el aumento de recursos médicos y mejoras en las condiciones de vida de los reclusos.

La situación de los privados de libertad en Esmeraldas

La cárcel de Esmeraldas ha sido uno de los centros penitenciarios más críticos del país, debido a las condiciones de hacinamiento y falta de infraestructura. El déficit de personal, tanto médico como de seguridad, también ha sido un tema recurrente en los informes de derechos humanos en el país.

Además, la Defensoría del Pueblo ha alertado sobre la necesidad urgente de mejorar el trato a los privados de libertad, garantizar su derecho a la salud y mejorar las condiciones de vida en las cárceles del país, no solo en Esmeraldas, sino en otros centros penitenciarios donde se presentan problemas similares.