El sector atunero miraba con optimismo el 2025 tras las sólidas ventas de 2024, pero ayer recibió un duro revés.
El Gobierno eliminó el subsidio al diésel para las flotas atuneras, manteniendo el beneficio solo para las embarcaciones de pesca artesanal.
Según Petroecuador, el Estado subsidiaba USD 0,40 por galón de diésel 2 y USD 0,72 por galón de diésel premium para las flotas atuneras y otras pesquerías.
De acuerdo con datos oficiales, 29 empresas atuneras absorbían el 60% de este subsidio, que en 2024 representó un gasto estatal de USD 42 millones, aunque anualmente se destinan USD 70 millones.
Las exportaciones atuneras alcanzaron USD 1.641 millones en 2024, con un volumen de 564.997 toneladas, un 21% más que el promedio de la última década.
“La industria tiene la capacidad de soportar el costo real del diésel”, afirmó Carolina Jaramillo, portavoz del Gobierno.
Durante las décadas de 1980 y 1990, Manta se consolidó como un centro atunero estratégico gracias al crecimiento de su flota pesquera. como atún barrilete, aleta amarilla y patudo. El 70% de las exportaciones de conservas de atún del país provienen de Manta, considerada la “Capital Mundial del Atún”.
Golpe al sector atunero industrial
Ricardo Buehs, presidente de la Asociación de Atuneros del Ecuador (ATUNEC), señaló tras reuniones con el Gobierno en Guayaquil que la eliminación del subsidio, la única medida de compensación para competir con flotas internacionales, afectará la estructura económica de las empresas. “Petroecuador deberá distribuir el combustible al precio internacional, como en Panamá, que no es productor”, advirtió. Buehs planea reunirse con el sector para evaluar las medidas a tomar.
Pesquerías subsidiadas son la competencia
Lucía Fernández, armadora pesquera de Manta, expresó confianza en que el presidente Daniel Noboa, buscará alternativas para el sector, que genera más de 300.000 empleos directos e indirectos.
“La mayoría de las pesquerías mundiales, como la de China, son subsidiadas y estoy más que segura que el presidente, como el empresario que es, está trabajando con todo su equipo económico para buscar otro tipo de subsidio”, afirmó.
Fernández propuso facilidades para importar insumos, repuestos o maquinaria, así como compensaciones tributarias, para mantener la competitividad. “No podemos competir con países similares sin un subsidio”, enfatizó.
La justificación del gobierno respecto a la medida anunciada
El Gobierno justificó la eliminación del subsidio por el sólido desempeño económico del sector.
Para mitigar el impacto, el Banco del Pacífico ofrecerá créditos respaldados por la Corporación Financiera Nacional (CFN) con un fondo de hasta USD 42 millones y una tasa de interés del 6% anual.
Estos préstamos buscan incentivar la modernización de la flota con motores más eficientes y sostenibles, reduciendo el impacto económico y ambiental.
Los riesgos para el sector atunero
La eliminación del subsidio al diésel incrementará los costos de producción, reduciendo la competitividad del sector atunero ecuatoriano frente a países como China, que aumentó su cuota en el mercado europeo del 9% al 24% entre 2015 y 2022, mientras Ecuador la vio disminuir del 32% al 26%. Otros desafíos incluyen el encarecimiento de insumos y fletes, señalan especialistas económicos.
El sector atunero es un pilar económico para Ecuador, consolidándolo como el segundo exportador mundial de atún.
Este sector genera alrededor de 20.000 empleos directos y 100.000 indirectos, especialmente en Manta.
Además, impulsa actividades conexas como la pesca, procesamiento, logística y comercio, fortaleciendo la economía local y nacional. El sector busca oportunidades en nuevos mercados, como China, tras el acuerdo comercial vigente desde mayo de 2024, y en posibles beneficios arancelarios en EE. UU. con la Ley IDEA.
