La ex tenista Angela Mortimer-Barrett, campeona del torneo de Wimbledon en la edición de 1961 y otros títulos de Grand Slam, falleció este lunes a la edad de 93 años.
La noticia fue confirmada por el All England Club, donde la tenista británica dejó huella con sus títulos en 1955, 1958 y 1961.
Dolor por la muerte de Angela Mortimer-Barrett
La presidenta del All England Club, Deborah Jevans, dijo que les entristece «profundamente» conocer la noticia del fallecimiento de Angela Mortimer Barrett MBE, la campeona individual femenina de Wimbledon de más edad. «Angela será recordada por su determinación y extraordinaria dedicación, que la llevaron a superar importantes retos para llegar a lo más alto del tenis», añadió.
«En nombre de todos en el All England Club, ofrezco mis sinceras condolencias al marido de Angela, John; sus hijos, Michael y Sarah Jane; nietos, familia y amigos», concluyó Jevans.
Su legado en el tenis
Angela Mortimer-Barrett, nacida el 21 de abril de 1932 en Plymouth, Inglaterra, comenzó a jugar tenis a los 14 años. Su primera victoria importante llegó en 1955 al ganar el Campeonato de Francia, rompiendo una sequía de 18 años para las tenistas británicas en Grand Slam. Ese mismo año, conquistó el dobles de Wimbledon junto a Anne Shilcock, consolidando su ascenso en el circuito.
En 1958, Mortimer-Barrett ganó el Campeonato de Australia, derrotando a Lorraine Coghlan en la final. Tres años después, en 1961, alcanzó su mayor logro al vencer a Christine Truman en la final de Wimbledon, en el primer duelo totalmente británico desde 1914.
Este título, ganado a los 29 años y con sordera parcial, la llevó al número 1 mundial de ese año.
Angela luchó contra las adversidades
A lo largo de su carrera, Angela Mortimer-Barrett enfrentó retos significativos. Su sordera, que comenzó temprano, la obligó a desarrollar una gran concentración. Además, padeció disentería amebiana, curada con una dieta de tres semanas que la debilitó.
A pesar de ello, regresó al tenis con éxito, alcanzando finales en 1956 y 1958, aunque perdió ante Althea Gibson en ambas ocasiones.
En el salón de la fama
Angela Mortimer-Barrett se retiró de individuales en 1962 tras ganar el Torquay Open, pero continuó en dobles y lideró el equipo británico de la Wightman Cup entre 1964 y 1970. En 1967, recibió la condecoración MBE por sus servicios al tenis y fue inducida al Salón de la Fama del Tenis Internacional en 1993.
Su esposo, John Barrett, también fue miembro del Salón.
Reconocimientos y vida personal
En 2004, una escultura de Angela Mortimer-Barrett se instaló en el All England Club junto a otras campeonas británicas.
Vivió cerca del club hasta su fallecimiento, asistiendo regularmente a eventos. Dejó dos hijos, Michael y Sarah Jane, y cuatro nietos. (13).