Internacional. María Elena está enferma y anhela volver a ver a su hermano, el Papa Francisco. No se ven desde hace doce años



María Elena Bergoglio, la hermana menor del Papa Francisco, no ha podido ver a su hermano desde que fue elegido Papa en 2013.

María Elena Bergoglio, hermana menor del Papa Francisco, no ha tenido un encuentro con él desde el año 2013. Ese año su hermano se convirtió en el Sumo Pontífice de la iglesia católica. A pesar de la distancia física y emocional, su conexión sigue intacta, como lo demuestra un emotivo gesto reciente que el Papa guarda en su escritorio en El Vaticano.

María Elena Bergoglio, de 76 años, vive actualmente en una institución religiosa en el extrarradio de Buenos Aires. Allí recibe  cuidados médicos. La hermana menor del Papa Francisco ha enfrentado problemas de salud durante los últimos años. Aquello le ha impedido a María Elena Bergoglio viajar a Roma para reunirse con él.

Desde que Jorge Bergoglio asumió el papado en marzo de 2013, no ha regresado a su país natal. Aquello ha generado sentimientos encontrados entre los argentinos y dentro de su propia familia. La relación entre ambos ha sido siempre cercana.

María Elena Bergoglio recuerda a su hermano mayor como un hombre muy presente, a pesar de las responsabilidades que asumió dentro de la Iglesia. Según relató a La Nación, ambos se mantenían en contacto frecuente por teléfono y cartas.

Jorge Bergoglio disfrutaba de cocinar para su familia. Le gustaba  preparar calamares rellenos y risottos de hongos, recetas heredadas de su abuela italiana. Sin embargo, tras su elección como Papa, los encuentros se volvieron más difíciles debido a las exigencias del cargo.

En una de las recientes audiencias en El Vaticano, el Papa Francisco recordó con preocupación la grave situación económica de Argentina. Durante su conversación con Rodolfo Aguiar, líder sindical argentino, el Papa compartió la anécdota de su hermana.

María Elena Bergoglio no puede viajar a El Vaticano

La salud de María Elena Bergoglio se ha visto afectada por el encarecimiento de los medicamentos en su país. Francisco expresó su preocupación por el bienestar de los argentinos, especialmente de los trabajadores y jubilados.

A pesar de la distancia, el vínculo con su hermana sigue siendo fuerte. En uno de los gestos más emotivos, el pintor Gustavo Massó entregó al Papa una escultura que replicaba la mano de la Virgen María.

“A pesar de las distancias, estamos muy abrazados”. Francisco, visiblemente emocionado, acarició la escultura un símbolo de la conexión inquebrantable con su hermana y su tierra natal.

JHM



Jose Moreira

Periodista santodomingueño, nacido el 14 de junio de 1987. Licenciado en Ciencias de la Comunicación, mención Periodismo por la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí. Con 17 años de trayectoria en el periodismo, desde sus años universitarios se vinculó al mundo de la comunicación, trabajando para medios Ediasa. Fundador de los diarios: La Marea, Centro y El Río.