Claudio Bieler, aquel delantero letal que en 2008 condujo a Liga de Quito a su histórica conquista de la Copa Libertadores, inició un nuevo capítulo en su vida, lejos de las canchas y cerca de la gestión pública. A los 41 años, el ‘Taca’ resultó electo concejal de la ciudad de Vera, en la provincia argentina de Santa Fe, al obtener el 27,58% de los votos en los últimos comicios.
Con 2.378 sufragios a su favor, Bieler logró una de las bancas por el frente político “Más para Santa Fe”. Quedó en segundo lugar, detrás de Javier Barbona, del movimiento “Sumemos Esfuerzos”, quien alcanzó el 37,36%. La participación electoral, sin embargo, fue baja: apenas votó el 46% del padrón habilitado.
Claudio Bieler: del fútbol a la política
El exdelantero ‘albo’ Claudio Bieler se suma así a la lista de exfutbolistas que optan por servir a sus comunidades desde el ámbito político. Su vínculo con Vera no es reciente. Allá dio sus primeros pasos como jugador y volvió en octubre de 2024 para jugar en Huracán de Vera, un club amateur de su ciudad natal.
La noticia de su elección remueve inevitablemente recuerdos en los hinchas de Liga de Quito. En Ecuador, el ‘Taca’ es una figura entrañable: anotó 71 goles en 156 partidos con la camiseta alba y fue pieza clave en la obtención del triplete internacional de 2008-2009: Libertadores, Recopa y Sudamericana. Incluso, estuvo presente en la final del Mundial de Clubes ante el Manchester United, donde Liga cayó por la mínima (1-0).
Larga trayectoria en clubes
Aunque nacido en Argentina, Bieler se nacionalizó ecuatoriano y en su momento expresó su deseo de vestir la camiseta de ‘La Tri’, aunque ese anhelo no se concretó. Su carrera lo llevó también por Colo Colo, Racing, Newell’s, Sporting Kansas City, Belgrano, San Martín de Tucumán, Independiente del Valle y otros clubes del continente, hasta retirarse finalmente en Agropecuario en 2024.
Hoy, lejos de las luces del fútbol profesional, Claudio Bieler empieza a construir otra clase de legado, esta vez como representante de su gente en el Concejo Municipal de Vera. El argentino-ecuatoriano cambia así de rol, en el que se espera ‘meta un gol’ a las necesidades.