Este domingo 3 de noviembre de 2024, se conformó una comisión ocasional encargada de evaluar la propuesta de reformar la Constitución de la República y permitir la operación de bases militares extranjeras.
Lo que significa que la iniciativa del presidente Daniel Noboa, que ha generado un intenso debate en el país, avanza en la Asamblea Nacional.
La nueva comisión tiene como representantes a Gissela Garzón, de la banca de Revolución Ciudadana) y Rafael Dávila, ejerciendo como presidenta y vicepresidente, respectivamente.
Entre otros legisladores que la conforman están: Sofía Sánchez, Mariana Yumbay, Arturo Ugsha, Rafael Dávila, Nathaly Murillo y Jorge Peñafiel.
Esta comisión se conformó durante una sesión virtual.
Analizarán la instalación de bases militares en el país
Así, tanto Garzón como Dávila, tendrán la responsabilidad de examinar la reforma al artículo 5 de la Constitución.
Mismo que se refiere a la instalación de bases militares extranjeras en el territorio ecuatoriano.
El proyecto de reforma se presentó en la Asamblea Nacional el 17 de octubre de 2024, y recibió el respaldo de la Corte Constitucional.
Garzón anunció que en la próxima sesión se discutirá el contenido del proyecto y se establecerá un cronograma de actividades para su análisis.
Este proceso es crucial, ya que la normativa vigente, establecida durante la presidencia de Rafael Correa, restringe la presencia de bases militares extranjeras.
La última base, la de Manta, cerró en 2009 tras un acuerdo bilateral.
La reforma a la Constitución puede llevarse a cabo a través de varias modalidades: consulta popular, reforma parcial o asamblea constituyente.
En este caso, el presidente Noboa optó por la reforma parcial.
Posteriormente, si se aprueba, se convocará a un referendo, dado que cualquier modificación que afecte la estructura del Estado requiere este mecanismo.
De ser así la pregunta para la consulta popular será formulada de esta manera:
“¿Está usted de acuerdo con eliminar la prohibición de establecer bases militares extranjeras o instalaciones extranjeras con propósitos militares en el territorio nacional, y de ceder bases militares nacionales a fuerzas armadas o de seguridad extranjeras, reformando parcialmente la Constitución de conformidad con el Anexo de la pregunta?”.
La discusión sobre bases militares extranjeras y su posible implementación marcará un capítulo importante en la política ecuatoriana, abriendo un debate sobre la soberanía y la seguridad nacional.