Los habitantes de las calles Los Laureles y Buenos Aires, en la ciudadela Bellavista, de Portoviejo, enfrentan serias afectaciones por el constante colapso del sistema sanitario. Winston Briones, morador del sector, aseguró que más de 20 familias viven entre aguas putrefactas y malos olores, algo que incluso los ha obligado a usar mascarillas dentro de sus casas.
“Tenemos este problema desde el año pasado, pero la situación se agravó en las últimas semanas. El olor es tan fuerte que debemos permanecer con las puertas y ventanas cerradas, como privados de la libertad. No podemos ni comer tranquilos”, mencionó Briones.
Eduardo Miranda, otro vecino del sector, detalló que son al menos seis las alcantarillas colapsadas por donde emanan las aguas residuales. Según el habitante, los últimos trabajos por parte de Portoaguas se realizaron el viernes pasado; sin embargo, todo sigue igual. “Sólo nos dicen que el alcantarillado está colapsado, pero no se hace nada más para arreglar este problema. Los vecinos hemos puesto varias denuncias, ya no sabemos qué hacer”, dijo Miranda.
Rebose: un problema recurrente
Mauro Guillén, gerente de Portoaguas, explicó que las intensas lluvias han provocado el colapso del sistema de alcantarillado en algunos sectores, debido al ingreso de agua y lodo. Declaró que este invierno ha superado el doble de precipitaciones registradas en los fenómenos de El Niño de 1983 y 1998, precisó. Ante estas alertas, precisó que se han dispuesto trabajos con siete carros hidrosuccionadores.
Uno de los sectores afectados del último mes fue un tramo de la calle Miguel H. Alcívar, a pocos metros del Puente Rojo. Allí, los vecinos soportaron durante más de 15 días los malos olores de las aguas servidas rebozadas. Felipe Intriago, subdirector de Desarrollo Territorial del Municipio de Portoviejo, explicó que en ese punto la fuerza de la corriente dañó la tapa de la trampa del sistema de alcantarilla, lo que provocó la salida de aguas servidas y desencadenó en el bloqueo del paso vehicular.
Mientras tanto, en la ciudadela Bellavista los moradores hacen un llamado al alcalde Javier Pincay para que los sumideros y las calles sean intervenidas con trabajos de limpieza. Solicitan que las labores empiecen cuanto antes, pues les preocupa contraer enfermedades debido a la contaminación que se evidencia en algunos tramos con aguas verdes y negras junto a las aceras.
Un alcantarillado con más 50 años de antigüedad
La intensa temporada invernal en Portoviejo ha generado graves problemas en áreas urbanas y rurales. En el centro de la ciudad, los reboses de alcantarillado y la acumulación de agua lluvia afectan a habitantes y negocios. Intriago recordó que el sistema de alcantarillado, con más de 50 años de antigüedad, es obsoleto y se obstruye fácilmente, causando taponamientos y acumulación de aguas negras.
Los sectores más críticos por la acumulación de aguas y sedimentos incluyen los alrededores del Puente Rojo, donde el lodo obstruye las trampas del alcantarillado, y la calle Miguel H. Alcívar, inundada hace unos días con aguas fecales. En el Parque Las Vegas, las calles Chile, 18 de Octubre y Quiroga acumulan lodo tras crecientes.
La ciudadela La Paz, cerca del río Portoviejo, sufre inundaciones que afectan decenas de viviendas. Calles como Sucre y la zona baja del puente Velasco Ibarra también enfrentan problemas recurrentes. Las lluvias intensas agravan estas afectaciones, evidenciando la urgencia de modernizar el sistema de alcantarillado para mitigar los impactos en la ciudad.