El presidente de Uganda, Yoweri Museveni, ha convocado a los ugandeses a un día de oración este sábado, que ha declarado festivo, con el fin de pedir a Dios que libre al país de la COVID-19.
Según ha explicado el mandatario en un mensaje en su Facebook, "cierto ugandés acudió a mí y me dijo que Dios le había dicho en una visión que yo debería organizar oraciones nacionales, científicamente organizadas, para que Dios nos libre de la COVID-19".
Por ello, ha decidido que en virtud de sus competencias el sábado 29 de agosto será "día nacional de oración y festivo" y ha invitado a los ciudadanos a que se queden en sus casas y "recen". Además, ha precisado que junto a él y su esposa en el palacio presidencial acudirán a rezar "unos pocos líderes religiosos".
El mandatario, de 75 años y que optará a su reelección en 2021, impuso fuertes medidas de restricción y confinamiento tras la detección del primer caso en el país para evitar su propagación. Desde entonces, Uganda ha contabilizado algo menos de 2.700 casos y 28 víctimas mortales.
