Moradores de la parroquia Chirijos, en el cantón Portoviejo, denuncian que la vía principal de acceso permanece en condiciones críticas, a pesar de que la Prefectura de Manabí inició su intervención en 2023. La obra, paralizada en varias ocasiones, aún no cuenta con carpeta asfáltica y afecta la salud, movilidad y economía de al menos 500 familias.
Comunidad denuncia abandono y falta de avances
El proyecto vial contempla la reconstrucción de 3,5 kilómetros de vía en la zona rural que conecta varias comunidades agrícolas. Sin embargo, según habitantes del lugar, los trabajos avanzaron solo en tramos parciales y se encuentran detenidos desde hace meses, sin un cronograma público definido.
Génesis Sánchez, residente del sector El Achiote, afirmó que la maquinaria solo intervino desde la entrada hasta el puente de la parroquia. “Desde la balsa hacia acá no hacen nada, y no nos informan nada desde hace meses”, señaló. También explicó que cada día debe salir más temprano para llevar a su hijo a la escuela debido a la intransitabilidad de la vía.
Sánchez indicó que en una reunión celebrada en 2023 con el GAD parroquial se anunciaron avances, pero estos nunca se concretaron. “Nos prometen, pero luego no cumplen. Pasamos entre el polvo y el lodo dependiendo del clima”, expresó.
Municipio de Portoviejo interviene vías dañadas por lodo en Estancia Vieja
Salud y transporte en riesgo constante en la vía a Chirijos
La situación afecta también a personas en condición vulnerable. María Sánchez, madre de un joven con discapacidad física y pulmonar, denunció que el polvo que se levanta por el mal estado del camino afecta gravemente a su hijo, quien debe movilizarse con mascarilla en todo momento.
“Él tiene un solo pulmón y vive enfermo. La vía está tan mal que ni los carros entran sin dañarse”, comentó. Según dijo, los habitantes ya no cuentan con transporte confiable dentro de la parroquia, y muchos conductores prefieren evitar ingresar al sector por el riesgo de averías.
Además, recordó que hace más de dos meses se retiró el asfalto anterior, dejando una vía en peor estado del que se encontraba. “Vinieron, rompieron todo y se fueron. Desde entonces esto se convirtió en una trampa”, afirmó.
Prefectura confirma retrasos y espera por asfalto
El director de Infraestructura Vial de la Prefectura de Manabí, Carlos Villacreces, reconoció los retrasos y explicó que el contrato original inició en 2023, pero se suspendió por la temporada invernal. Posteriormente, la obra fue interrumpida nuevamente por los trabajos del Plan Triple A, liderado por el Municipio de Portoviejo.
Villacreces detalló que la obra se retomó en mayo de 2024, con labores de subdrenaje y rectificación del trazado. No obstante, explicó que el proceso se volvió a frenar por la escasez de asfalto a nivel nacional, lo que impide avanzar a la siguiente fase técnica del proyecto.
“El país está sin asfalto, y sin asfalto no podemos colocar la base, porque se contamina y pierde calidad”, precisó. Aseguró que el contratista ya recibió un abono y que el tramo de 1,5 kilómetros que ya cuenta con imprimación asfáltica está listo para avanzar, mientras que los 2 kilómetros restantes esperan por colocación de base y sellado.
Inversión, plazos y expectativa de entrega
El contrato tiene una asignación de $771 mil dólares y contempla la entrega de la vía con cunetas de hormigón, base estabilizada y carpeta de asfalto de dos pulgadas. El funcionario indicó que las cunetas aún no se ejecutan, ya que su construcción depende de que la calzada esté asfaltada para dirigir adecuadamente el drenaje.
Villacreces proyectó que, si se regulariza la producción nacional de asfalto, la obra podría culminarse entre agosto y septiembre de 2025. “El prefecto y la Junta Parroquial están haciendo seguimiento diario al tema, pero dependemos de un factor externo que escapa a nuestro control”, puntualizó.
Una espera prolongada sin soluciones inmediatas a la vía a Chirijos
Mientras los cronogramas se extienden, la comunidad de Chirijos sigue enfrentando dificultades diarias para trasladarse, acceder a servicios básicos y cuidar su salud. Las familias piden que, al menos, se coloque material provisional en los tramos más deteriorados mientras se retoman los trabajos estructurales.
“Llevamos años esperando. Solo queremos una vía que nos permita vivir con dignidad y salir sin miedo a quedarnos atrapados”, expresó Génesis Sánchez. La comunidad espera que 2025 no sea otro año de espera, sino el punto final de una obra que lleva más tiempo suspendida que en ejecución.