Estados Unidos expresó su reconocimiento a Diana Salazar, quien renunció este lunes a su cargo como Fiscal General del Estado de Ecuador, luego de más de seis años de gestión. La embajada estadounidense destacó su compromiso con la justicia y recordó que fue galardonada en 2021 con el Premio Internacional a los Campeones Anticorrupción.
El pronunciamiento de Estados Unidos
En un comunicado oficial, la embajada de Estados Unidos en Ecuador valoró como “destacada” la gestión de Diana Salazar al frente de la Fiscalía. “Durante su gestión demostró un firme compromiso con la justicia”, señaló la sede diplomática. Además, reafirmó que Washington mantiene su respaldo a las instituciones ecuatorianas en la lucha contra el crimen organizado y la impunidad.
En 2021, el gobierno estadounidense premió a Salazar con el galardón internacional a los Campeones Anticorrupción, reconociendo su papel clave en procesos de alto impacto. “Por procesar casos notorios de corrupción y contribuir a la transparencia en el Ecuador y la región”, detalló entonces el Departamento de Estado.
“Aferrarse a los cargos no le hace bien al país”, explicó la fiscal al anunciar su renuncia.
Casos emblemáticos de Diana Salazar
Diana Salazar asumió el cargo el 8 de abril de 2019. Su paso por la Fiscalía se convirtió en sinónimo de una lucha directa contra estructuras delictivas, aunque también fue foco de ataques y polémicas.
Entre los casos más emblemáticos que lideró se encuentra el caso Sobornos (también conocido como Arroz Verde). En esta investigación se procesó a altos líderes del correísmo, incluido el expresidente Rafael Correa y el exvicepresidente Jorge Glas, por un esquema de coimas a cambio de contratos estatales. Ambos fueron sentenciados a ocho años de prisión por cohecho en 2020.
“Estos casos permitieron abrir una puerta a la regeneración institucional”, comentaron analistas judiciales en su momento.
La lucha contra la corrupción judicial
La lucha contra el narcotráfico y el lavado de activos fue otro de los ejes de la gestión de Salazar. Bajo su liderazgo, la Fiscalía ejecutó operativos que desarticularon bandas transnacionales. Se incautaron bienes por millones de dólares y se procesaron a altos miembros de organizaciones criminales.
Casos como Metástasis, iniciado en diciembre de 2023, expusieron la infiltración del narcotráfico en el sistema judicial. Esta red involucraba a jueces, fiscales, policías y políticos, quienes facilitaban impunidad a cambio de dinero. La investigación surgió tras el asesinato del narcotraficante Leandro Norero, conocido como El Patrón.
El más reciente, Caso Plaga, reveló cómo jueces, abogados y policías liberaban a criminales peligrosos mediante artimañas legales. Salazar aseguró que “estas mafias operaban en la sombra del sistema judicial”.
Los casos de controversia
Diana Salazar no solo recibió reconocimiento de Estados Unidos. También fue destacada por organismos internacionales, como Transparencia Internacional y Human Rights Watch, por su independencia y firmeza.
No obstante, su gestión generó críticas, especialmente de sectores afines al correísmo. La acusaron de persecución política y de “responder a intereses extranjeros”. Las tensiones se agudizaron tras la condena a Correa y Glas, figuras claves del correísmo.
Uno de los señalamientos más recurrentes fue su manejo del caso INA Papers, que vincula al expresidente Lenín Moreno con una empresa offshore y movimientos financieros dudosos cuando era vicepresidente de Rafael Correa. Aunque se abrió una investigación preliminar, los avances fueron mínimos, lo que generó cuestionamientos sobre un presunto doble estándar para juzgar de una forma a unos y diferente a otros.
El respaldo de Estados Unidos
Durante sus más de 2.200 días al frente de la Fiscalía, Salazar enfrentó amenazas, campañas de desprestigio y presiones políticas. Su equipo reportó múltiples intentos de intimidación, muchos vinculados a investigaciones sensibles.
El respaldo de Washington al cierre de su gestión, en gran medida, valida sus acciones en la lucha contra la corrupción.