En la ciudad de Cuenca hay indignación porque un recién nacido muere dentro de las instalaciones de una clínica, el menor nació en el mismo lugar y presentó complicaciones en su salud.
El centro médico retuvo en recién nacido hasta que los padres paguen el dinero por la atención brindada, valor que supera los 8 mil dólares.
Sin embargo, los padres al no contar con el dinero, quisieron trasladar a su hijo a un hospital público, pero en la clínica de Cuenca se lo impidieron.
Personal del centro hospitalario no permitió el traslado del recién nacido, quien tras no recibir atención médica muere en la clínica.
Pero la odisea de la familia aún estaba lejos de terminar, pues en la clínica también se retuvo el cadáver del bebé. Ya con el recién nacido sin vida, en la clínica redujeron el costo de la cuenta. Sin embargo, este seguía siendo alto para la familia.
Tras sentirse imposibilitado de asistir a su bebé, el padre buscó asistencia legal, poco tiempo antes del deceso de su vástago. Él quería recuperar su cuerpo para darle sepultura.
Ahora, los progenitores emprendieron acciones legales en contra de la clínica. Según Gustavo Parra, abogado de la familia, la Defensoría del Pueblo intervino para que a los padres se les entregara el cuerpo del recién nacido.
La defensa de esta familia cuestiona las acciones emprendidas por le casa de salud y lamenta el deceso del recién nacido, a quien sus padres cremaron.
