La violencia en Guayaquil alcanzó un nuevo pico de horror. El 10 de mayo de 2025, los cuerpos sin vida de Liliana Anay Córdova, de 28 años, y Jonathan Israel Gómez, de 19, fueron hallados en el canal de la Muerte, en Monte Sinaí. La pareja, reportada como desaparecida desde el 29 de abril, fue víctima de un secuestro en una vivienda del noroeste de la ciudad. La Policía Nacional confirmó el hallazgo, intensificando la conmoción en la comunidad.
Según las investigaciones, Córdova y Gómez acudieron a una casa en el sector Voluntad de Dios, Monte Sinaí, donde Gómez se mudaba. Allí, un grupo de al menos ocho delincuentes armados irrumpió para robar, secuestrando a la pareja. Los criminales dejaron solo sus ropas en la vivienda, según vecinos.. Los cuerpos, hallados en un canal de aguas lluvias en la cooperativa Reinaldo Quiñonez, tenían restos de cal, sugiriendo un intento de ocultar el crimen.
En el canal de la Muerte fueron hallados los cuerpos de la pareja
Monte Sinaí, parte del distrito Nueva Prosperina, es el epicentro de la violencia en Guayaquil. Hasta el 7 de mayo de 2025, este sector registró 310 asesinatos, un aumento drástico frente a los 82 del mismo período en 2024. La zona, conocida por el canal de la Muerte, es un punto recurrente de hallazgos macabros, incluyendo extremidades y cuerpos desmembrados. Esta escalada delictiva está vinculada a bandas como Los Choneros, que extorsionan mediante “vacunas” a residentes y negocios.
Liliana, madre de dos niñas de 5 y 7 años, deja un vacío irreparable. Su familia, devastada, exigió a las autoridades una investigación exhaustiva. “Queremos justicia; no podemos permitir que esto quede impune”, declaró su hermana a medios nacionales. La Unidad Antisecuestro y Extorsión (Unase) y la Dirección de Muertes Violentas (Dinased) trabajan en el caso, pero la falta de avances tras dos semanas alimenta la frustración. Los familiares recorrieron morgues, hospitales y canales en busca de pistas, sin resultados hasta el hallazgo.
Por su parte, Jonathan Gómez tenía antecedentes por tráfico de drogas y tenencia ilegal de armas, según la Función Judicial. Fuentes policiales sugieren que su vínculo con una banda delictiva pudo haber motivado el crimen, aunque no se descartan otras hipótesis. La práctica de “vacunas” en Monte Sinaí, donde se cobran hasta 2 dólares semanales por hogar, crea un clima de terror, según medios nacionales.
La ciudadanía, consternada, clama por medidas efectivas. En redes sociales, usuarios expresaron indignación, calificando a Monte Sinaí como “tierra sin ley”. Un post en X del 12 de mayo señaló: “La violencia en Guayaquil no da tregua; las familias merecen seguridad”. La Defensoría del Pueblo, en un informe de 2024, alertó que el 70% de los crímenes violentos en Guayaquil quedan sin resolver, evidenciando fallos en el sistema judicial.