Con los apagones los agentes de tránsito se encargan de dirigir el tráfico para evitar accidentes durante las horas pico y en las intersecciones más conflictivas. Lo cual, resulta conveniente en ciudades con un parque automotor numeroso.
Sin embargo, el número de agentes suele ser insuficiente para sustituir la función de los semáforos. Y, al mismo tiempo, vigilar toda la ciudad.
Es en estas condiciones de apagones cuando la imprudencia, el apuro y otros factores contribuyen a caotizar el tránsito en determinados sectores.
Por ello, los municipios deberían considerar la posibilidad de reclutar a ciudadanos voluntarios. Esto, para que colaboren en la dirección del tránsito exclusivamente en los horarios de los apagones.
Desde luego, deben ser capacitados adecuadamente y seleccionados con los mejores perfiles. Si esta no es la opción, se debería buscar otra.
Los apagones, por lo visto, se mantendrán indefinidamente mientras no se superen los problemas que afectan a la generación eléctrica en el país.
Además, es necesario un estudio que determine en qué lugares deben mantenerse los semáforos y en cuáles no son tan necesarios. Pues hay sitios en los que la experiencia muestra que sin ellos el tránsito fluye adecuadamente.
Con esto, se optimiza el uso de este recurso urbano y se cubren más áreas durante los apagones.
Editorial de El Diario: Publicado el 28 de octubre del 2024 en nuestra edición impresa.