Desde esta columna de opinión nos unimos a las voces internacionales que rechazan lo que ya es, a todas luces, un régimen totalitario que administra Nicaragua.
En las últimas semanas, el gobierno de Daniel Ortega ha detenido a trece opositores, entre ellos cuatro precandidatos a la Presidencia de la República, bajo cargos de golpismo, traición a la patria y de querer desestabilizar al país.
Lo hace al amparo de leyes elaboradas a su antojo, dirigidas a nulitar cualquier vestigio de oposición, aprobadas por una Asamblea Nacional cuya mayoría está alineada a la corriente sandinista.
“Ecuador debe expresar su posición frente a las actitudes dictatoriales en Nicaragua y Venezuela”.
Estas manipulaciones políticas permiten anticipar el resultado de las próximas elecciones, previstas para noviembre, pues el Consejo Supremo Electoral también está manejado por gente afín al gobernante.
Al igual que en Venezuela, en Nicaragua existe una preocupante vulneración de la democracia, evidenciada en restricción de derechos, una tendencia al totalitarismo y en la vulneración de libertades intrínsecas.
Ecuador debe manifestar su posición frente a estas prácticas reñidas con la democracia y cercanas a la dictadura. No se puede guardar silencio frente a semejante atropello a los derechos.
Editorial de El Diario publicado este miércoles 16 de junio del 2021 en nuestra edición impresa.