La Policía Nacional de Ecuador sufrió una humillación por parte de delincuentes que ingresaron a una de sus instalaciones, sometiendo a los uniformados que allí se encontraban.
El condenable hecho, a más de escenificar un mal momento para la institución, habla del peligroso y delicado momento que vive Ecuador con delincuentes que ejecutan acciones con niveles de alevosía muy altos.
La madrugada del pasado viernes, unos 30 delincuentes vestidos de negro y con emblemas de la propia institución ingresaron de forma violenta a los patios de la Policía Judicial en el sector de Carcelén, en el norte de Quito.
“Si algo tan grave no se aclara y sanciona, quedará un muy mal precedente”.
Los antisociales entraron a las instalaciones donde se ubican autos y evidencias robadas. Lo hicieron con violencia y por la puerta principal. Según los datos que se conocen, los delincuentes portaban armas largas y de muy alto calibre.
Inicialmente se piensa que fue un robo, pero las autoridades no han dado a conocer detalles sobre lo que ocurrió.
Si algo tan grave no se aclara y sanciona, quedará un muy mal precedente.
Una acción ejemplarizadora podría evitar que los antisociales vuelvan a “robar a la Policía” con todo lo que eso implica como hecho y como mensaje.
Editorial de El Diario publicado este martes 1 de marzo del 2022 en nuestra edición impresa.