La designación de funcionarios públicos mediante concurso, y tanto más si se trata de procesos para elegir autoridades, debe realizarse en la forma más transparente posible, con acceso a los ciudadanos.
Una veeduría que observa la elección del contralor general del Estado ha denunciado que no se entrega información del proceso, que está a cargo de una comisión escogida por el Consejo de Participación Ciudadana.
Los concursos para elegir a los funcionarios tienen la denominación de públicos y, por lo tanto, no debería existir sobre ellos reserva ninguna. Esto garantiza la transparencia y el rigor con los que se maneja el proceso.
“La transparencia debería aplicarse en todos los procesos para escoger a los funcionarios”.
Con la evolución de las normas y la tecnología, no debería existir cabida para procesos dirigidos o valoraciones cargadas de subjetividad. Eso debe ser parte de las irrepetibles acciones del pasado.
La designación del contralor es un tema actual, pero estos mismos principios deberían aplicarse, para la designación de funcionarios de cualquier nivel en la administración pública.
La transparencia en los procesos públicos es una obligación y debe ser parte de las políticas de Estado. Los ciudadanos tienen derecho a conocer la forma en que se designa a sus autoridades y a los servidores públicos.
Editorial de El Diario publicado este viernes 26 de noviembre del 2021 en nuestra edición impresa.