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El escogitamiento de Portoviejo como una de las cinco ciudades del mundo para desarrollar proyectos de restauración de ecosistemas urbanos, financiado con fondos de la Unión Europea, es una oportunidad sin igual para recuperar el río Portoviejo.

Esta debe ser una prioridad, no solamente para el cantón Portoviejo, sino para los cantones que se abastecen de su cauce, pues del río vive casi un millón de habitantes de Manabí. Y también debería participar el Gobierno Provincial, pues se trata de un tema regional.

Es digno de felicitar el liderazgo del GAD de Portoviejo en la gestión para lograr este financiamiento, y de manera especial el trabajo desinteresado y cívico de personas y fundaciones que realizan mingas y trabajan en la rehabilitación del río.

“El trabajo debe comprometer a los municipios y al Gobierno Provincial”.

Se requiere que el trabajo se realice en tres frentes: en lo ambiental, en lo urbano y en lo social. En lo ambiental, con un manejo adecuado de las riberas y el caudal, así como con la restitución de las especies nativas.

En lo urbano, se tiene que dejar de considerar al río como el patio trasero y convertirlo en la fachada de las ciudades. En lo social, debe hacerse conciencia en la relación de las personas con este recurso natural para evitar acciones como la de arrojar basura, descargar aguas servidas y destruir la vegetación.

Hay que mantener el río, pues es el que garantiza la provisión de agua durante todo el año.

Editorial de El Diario publicado este martes 28 de diciembre del 2021 en nuestra edición impresa.