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Un plan de ahorro energético es necesario. La crisis energética que enfrenta Ecuador exige la respuesta de todos.

En este contexto, es fundamental que se implemente un plan de ahorro de electricidad que complemente los racionamientos ya establecidos.

La situación actual, caracterizada por severo déficit de potencia, se agrava por la sequía más intensa en seis décadas, lo que hace imperativo que todos los sectores de la sociedad contribuyan a reducir el consumo eléctrico.

Es incomprensible cómo, en medio de esta crisis, en algunos lugares permanecen encendidas luces ornamentales y letreros innecesarios. Este derroche no solo afecta a quienes cumplen con el ahorro, sino que también pone en riesgo el suministro eléctrico para todos los ecuatorianos.

“En algunos lugares permanecen encendidas luces ornamentales y letreros innecesarios”.

El Gobierno ha propuesto medidas como la exoneración del pago de electricidad para hogares que consuman menos de 180 kWh mensuales entre noviembre y febrero, así como descuentos para quienes reduzcan el consumo.

Estas iniciativas deben ir acompañadas de un cambio cultural hacia el uso responsable de la energía.

Es esencial que cada ciudadano asuma su parte en este esfuerzo colectivo, por ahorro y por contribuir a la mejora de la situación.

La eficiencia energética no es solo una cuestión de política pública; es, también, un deber cívico. Un plan es urgente.

Editorial de El DiarioPublicado el 11 de noviembre del 2024 en nuestra edición impresa.