La crisis eléctrica y apagones que vive Ecuador ha desatado preocupación en cada hogar, empresa y negocio. Los racionamientos constantes y prolongados afectan la vida cotidiana de los ecuatorianos, generando inquietud, descontento y pérdidas económicas.
Ante esta situación, el Gobierno tiene la obligación de actuar con transparencia. Informar de manera clara y sencilla, y explicar qué se está haciendo para remediar esta crítica situación.
El derecho a la información es fundamental, y la ciudadanía necesita conocer la realidad de esta crisis energética y sus apagones. Es insuficiente que se publiquen boletines con explicaciones técnicas que la mayoría no comprende.
“Actuar con transparencia e informar de manera sencilla a la ciudadanía”.
Para el ciudadano común es irrelevante hablar de cotas en las presas cuando lo que debería explicarse es para cuánto puede alcanzar el caudal actual.
La información sobre los apagones programados debe ser accesible y adaptada al público. Sin términos complejos que aumentan la confusión y el malestar.
La claridad en la comunicación evitará rumores y desconfianza. Además de generar conciencia sobre la importancia de racionalizar el uso de energía.
La ciudadanía merece estar informada en forma constante y veraz.
En tiempos de incertidumbre por los apagones, la transparencia y la claridad son el mejor camino hacia la confianza y el compromiso colectivo.
Editorial de El Diario: Publicado el 1 de noviembre del 2024 en nuestra edición impresa.