El desabastecimiento de medicinas e insumos de laboratorio en los hospitales públicos, tanto del Ministerio de Salud Pública (MSP) como del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), es hasta ahora un problema sin solución cierta.
La falta de estos recursos básicos implica un riesgo para la salud de la población. Especialmente para quienes dependen exclusivamente del sistema público de salud.
Esta crisis puede hacer que personas en condiciones de pobreza, que padecen enfermedades crónicas, se vean obligadas a interrumpir sus tratamientos.
De la misma forma, no se puede tener un diagnóstico oportuno de las dolencias si los laboratorios no tienen los reactivos necesarios.
“Las medidas que han anunciado no tienen resultados satisfactorios visibles”.
Las autoridades han anunciado medidas y planes para resolver este problema, pero no tienen resultados satisfactorios visibles.
Existe una evidente falta de transparencia en la adquisición y distribución de los medicamentos que agrava la situación.
Es responsabilidad, tanto del Gobierno central como del IESS, garantizar el abastecimiento continuo de medicinas e insumos.
Las autoridades tienen que mejorar la planificación, supervisar los contratos y sancionar a quienes incumplan. La burocracia y la ineficiencia no pueden seguir afectando a la salud de los ciudadanos con la falta de medicinas.
Editorial de El Diario: Publicado el 22 de diciembre del 2024 en nuestra edición impresa.