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Descontaminar de los ríos en Manabí es una necesidad impostergable, dado el sostenido y progresivo deterioro de las fuentes hídricas, que alcanza niveles preocupantes.

Los ríos, de los que se abastece de agua a la mayor parte de la población manabita, se han convertido en vertederos de desechos industriales y aguas servidas, basureros y sitios para arrojar residuos agrícolas. Por eso hay que descontaminar.

Lo que antes eran fuentes de vida y sustento, ahora son un riesgo para la salud de las personas y una amenaza para el ecosistema.

Los gobiernos locales, con el apoyo del Gobierno Nacional, deben tomar como una prioridad la descontaminación de los ríos.

Es un imperativo en el que, también, es necesario que intervenga la sociedad civil.

“Deben intervenir tanto el sector público como la sociedad civil”.

Se precisa desde la promulgación de ordenanzas que castiguen con severidad la desafortunada práctica de arrojar desechos al río hasta la creación de conciencia a través de campañas de educación ambiental.

Además, hay que tomar acciones que remedien el problema actual, de acuerdo con la realidad de cada lugar.

No es posible que no se haga nada por enfrentar este problema y que, cuando se han tomado medidas, hayan caído pronto en el olvido por el desinterés de los funcionarios.

Editorial de El Diario publicado el lunes 29 de mayo del 2023 en nuestra edición impresa.