Hablar de Manuel Inocencio Parrales y Guale es hablar de la historia de Jipijapa.
Fue un precursor de la reforma agraria y un firme defensor de los pueblos indígenas de la Costa ecuatoriana. Nació en Jipijapa el 17 de junio de 1745. Este año, Manabí recuerda los 280 años de su natalicio, como lo señala la obra Valores Manabitas, del historiador profesor José Arteaga (+).
Recordemos algunas de las gestas de este insigne ciudadano, quien luchó por el respeto a los derechos de sus coterráneos frente a los abusos de los colonizadores españoles. Parrales defendió tierras que, durante siglos, pertenecieron a los nativos y que eran fuente de sustento para sus familias. Inició gestiones en Portoviejo, Guayaquil y Quito, pero se topó con la indiferencia de las autoridades coloniales, que ignoraban las justas reclamaciones del pueblo jipijapense.
Ante la falta de respuesta, decidió viajar a España y exponer directamente al rey Carlos III la situación. Lo hizo en al menos tres ocasiones. En uno de esos viajes, en 1777, permaneció cerca de un año en la península. Como resultado de su perseverancia, el 2 de agosto de 1780 consiguió que el rey expidiera una cédula real en Madrid. El documento disponía que las tierras no debían ser repartidas ni heredadas a particulares, sino que debían constituirse como patrimonios de los nativos.
Su actuación como cacique y gobernador de Jipijapa fue larga y compleja. La lucha iniciada el 1 de junio de 1796 concluyó el 20 de octubre de 1805, con una sentencia definitiva protocolizada en la escribanía de Su Majestad. Dicho documento reposa en un museo de la capital española. Después de esa victoria, Parrales regresó a Jipijapa, dejando un legado histórico que aún se reconoce en Manabí y en todo Ecuador.
Las autoridades locales y nacionales han rendido homenaje a su memoria, bautizando con su nombre escuelas, colegios, calles, barrios y cooperativas. En 2011, el Gobierno Autónomo Descentralizado del cantón Jipijapa conformó una comisión con representantes de instituciones educativas y gremiales para recopilar su historia y resaltar sus virtudes sociales, educativas y políticas. El trabajo fue presentado en el auditorio del GAD Jipijapa y luego enviado a la Asamblea Nacional.
El 11 de octubre de 2011, mediante resolución publicada en el Registro Oficial Nº 578, Manuel Inocencio Parrales y Guale fue declarado precursor y defensor de los pueblos indígenas de la Costa ecuatoriana en la era colonial. La resolución fue remitida a varios ministerios, instituciones provinciales y a la Comisión de Historia del Ecuador.
Hoy, en el Mes del Manabitismo, Manabí rinde homenaje a uno de sus más ilustres ciudadanos.