A pocos días de cumplir los primeros dos años de la carrera de Derecho en la Universidad del Sur de Manabí, es de destacar la innovación y apertura de la academia a la formación totalmente en línea que está aplicando esa alma mate.
Esto permite llegar a más lugares y personas que abrazan el apostolado de la justicia para formarse en los apasionantes senderos del Derecho.
La pregunta es: ¿se hace justicia o se aplica la ley en Ecuador de hoy?
La justicia fue representada por los griegos por una divina mujer de la raza de los titanes. Se trataba de la diosa Temis, que en una de sus manos sostiene, con los ojos vendados para evitar parcializarse, una balanza en la que sopesa la fuerza de las pruebas y de los argumentos hacia la inocencia o la culpabilidad, y en la otra mano porta una poderosa espada para hacer cumplir la ley.
No es exagerado decir que la impunidad generalizada en nuestra sociedad actual, la corrupción flagrante y sin castigo, la ausencia de responsables por hechos graves, merecen una reflexión sobre el papel de la justicia en Ecuador, poniendo a Temis en el banquillo de los acusados, por su permisividad al deshonor y origen de fortunas de la noche a la mañana, que son el resultado de actos reñidos con la ley.
La formación de los nuevos profesionales cuya semilla está sembrando la Unesum es parte de la respuesta a la interrogante, porque tiene la particularidad de llevar en esa nueva generación de abogados el mensaje esperanzador de mejores días a la administración de justicia, de contribuir a la limpieza de los bochornosos casos que cada día nos han ido quitando la capacidad de asombro.
n la carrera de Derecho de la Unesum se está gestando en el vientre de la academia del sur esa nueva generación de abogados, con la mística impartida y sembrada en tierra fértil, para combatir con su accionar la tan horrorosa corrupción que lacera el alma social del país.
Que la iniciativa de formar nuevos profesionales íntegros, para cambiar el actual estado de impunidad frente a los responsables de estafas masivas, desapariciones, secuestros, violaciones de los derechos humanos, sea una constante en los demás estamentos de formación de nuestra juventud. Bien por la Unesum.