Buscar apoyo en profesionales es imprescindible cuando atravesamos situaciones difíciles en nuestras vidas.
Antes pensaba que las personas que iban al psicólogo eran débiles, hasta que me toco la necesidad de abrir puertas a desconocidos.
Como en mi caso, he visto a muchas personas que han pasado del escepticismo a la necesidad de ayuda profesional, y no debe darnos ni pena ni vergúenza pedir apoyo ya sea a familiares, a los amigos o a algún profesional.
Cuando vivimos al ritmo acelerado y enfrentamos situaciones que nos saturan, la vida se vuelve una montaña rusa, y ocasionalmente no se escogen las opciones adecuadas; esto termina en una inestabilidad emocional y se necesita un soporte, llámese este un psicólogo, psiquiatra, sacerdote o amigo. Lo importante es dar el primer paso.
En lo personal me preocupa la salud mental de los niños y adolescentes que son muy vulnerables. Creo que los padres deben estar atentos ante posibles casos de acoso, de malas compañías, de influencias externas que a veces llegan disfrazadas de distracciones.
Así mismo hay adultos mayores que callan mucho dolor y ellos merecen atención en sus años dorados, y tener la apertura para expresar sus emociones.
Seguramente muchas personas sí buscan un guía, pero también están los que no tienen acceso a los profesionales en el sector público y peor a los privados; según estadísticas –de varias fuentes- el número de psicólogos ecuatorianos no cubre la necesidad del país. Un ejemplo claro es que las instituciones educativas fiscales tienen un déficit del 67 por ciento en psicólogos.
Según cifras oficiales, los egresos hospitalarios por trastornos mentales crecieron en los últimos años, se pasó de 6.482 en 2020 a 10.362 en 2023; registrándose un considerable aumento.
En el caso de los manabitas los últimos 10 años hemos enfrentado una serie de situaciones que han provocado estrés generalizado en la población: el terremoto de 2016, la pandemia de Covid19 y la ola de delincuencia en los diferentes cantones.
El gobierno actual tiene en sus planes trabajar en la Política de Nacional de Salud Mental 2024 – 2030, este tema es demasiado importante y debe ser visibilizado y debe ser tema de debate, reflexión y atención. Lo que se busca es fortalecer el sistema de salud mental, reducir factores de riesgo, proteger a la población.
@AndreaLimongiS